Kyle Shanahan, coach de 49ers, sufre tercera decepción en Super Bowl
El tercer viaje al Super Bowl para el coach Kyle Shanahan terminó del mismo modo que los primeros dos, con una decepción mayor después de dejar escapar una ventaja tardía.
El coach de los 49ers ha desarrollado una ofensiva que los equipos de la liga tratan de imitar y tiene un vasto árbol de entrenadores que lo convierten en una de las figuras más influyentes a sus 44 años.
Simplemente no tiene un título de campeón después de que San Francisco dejó escapar dos ventajas tardías y perdió 25-22 ante los Chiefs de Kansas City en el Super Bowl el domingo.
Ello se suma a desperdiciar una ventaja de 10 puntos de los 49ers de Shanahan en el cuarto periodo en el Super Bowl de hace cuatro años ante Kansas City e incluso un colapso mucho más grande en la temporada 2016 cuando era el coordinador ofensivo. Los Falcons dejaron escurrir una delantera de 25 puntos y perdieron 34-28 en tiempo extra con Nueva Inglaterra.
Esta última podría ser la más complicada de asimilar ya que los 49ers tenían al mejor equipo de la NFL por la mayor parte de la temporada y parecían destinados a darle a Shanahan su primer campeonato.
Pero los Niners desperdiciaron una ventaja de 10 puntos en la primera mitad y después no pudieron mantener un par de delanteras por tres puntos al final, haciendo de Shanahan el primer head coach en la historia que pierde dos ventajas de doble dígito en el Super Bowl.
Sus 49ers también dejaron escapar una ventaja de 10 en el cuarto periodo en el juego de campeonato de la NFC en 2021 contra los Rams, con lo que está empatado para la mayor cantidad de debacles en juegos que ganaba por doble dígito en la historia de la NFL.
Mahomes y los Chiefs ahora le han propinado dos derrotas a los 49ers de Shanahan en dos Super Bowls en las últimas cinco temporadas, para que la franquicia que forjó una dinastía en los 80’s y 90’s haya llegado a 29 temporadas seguidas sin ganar un título.
Ahora Shanahan debe esperar seguir el camino de su padre, Mike, quien perdió sus primeros tres viajes al Super Bowl, todos como asistente en Denver, antes de ganar uno como coordinador de los 49ers en la temporada de 1994 y títulos consecutivos para los Broncos en 1997-98.