Recluso apuñaló al deshonrado Larry Nassar por haber hecho comentarios lascivos durante partido de Wimbledon

El sospechoso Shane McMillan supuestamente apuñaló a Nassar con un arma improvisada en el cuello, el pecho y la espalda

Graeme Massie
Miércoles, 12 de julio de 2023 17:15 EDT
¿Cambiarán de prisión a Larry Nassar después del ataque?
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El exmédico de USA Gymnastics caído en desgracia Larry Nassar fue apuñalado varias veces por un compañero de prisión después de que hizo comentarios lascivos durante un partido de Wimbledon, el sospechoso dijo a los trabajadores de la prisión, según los informes.

El recluso apuñaló al abusador sexual convicto, de 59 años, en la espalda y el pecho dentro de la penitenciaría de alta seguridad de los Estados Unidos Coleman en Florida, durante la tarde del domingo.

Un portavoz de la Agencia Federal de Prisiones informó que un recluso en la prisión requirió “esfuerzos para salvarle la vida” después del ataque y trasladaron a la víctima a un hospital local para recibir más tratamiento y evaluación.

El sospechoso, a quien The Associated Press identificó como Shane McMillan, apuñaló a Nassar con un arma improvisada, y lo hirió en el cuello, el pecho y la espalda. Luego, los reclusos adustos se apresuraron y separaron a McMillan de Nassar, dijo una fuente al medio de comunicación.

McMillan fue declarado culpable de agredir a un agente penitenciario en una penitenciaría federal en Luisiana en 2006 y de intentar matar a puñaladas a otro recluso en una prisión federal de máxima seguridad en Florence, Colorado, en 2011, según los registros judiciales.

Nassar permanece en el hospital en condición estable con lesiones que incluyen un pulmón colapsado, informó AP. The Independent se comunicó con la Agencia Federal de Prisiones en busca de comentarios.

El exmédico del equipo de USA Gymnastics está cumpliendo una sentencia de entre 40 y 175 años de prisión por abusar sexualmente de jóvenes atletas femeninas a su cargo.

Como médico del equipo, el depredador sexual abusó de su posición de confianza y se aprovechó de decenas de jóvenes gimnastas durante varias décadas, incluidas las galardonadas olímpicas Simone Biles, Aly Raisman, Gabby Douglas y McKayla Maroney.

En muchos casos, agredió sexualmente a sus jóvenes víctimas con el pretexto de que les proporcionaba “tratamiento médico” por lesiones en la cadera y la pierna sufridas durante el deporte.

Además de USA Gymnastics, con sede en Indianápolis, también trabajó en la Universidad Estatal de Michigan y abusó de las atletas allí.

Muchas de sus víctimas se convirtieron en las estrellas de gimnasia más grandes de Estados Unidos y ya hablaron sobre los años de abuso que soportaron en sus manos.

El escándalo no solo afectó a USA Gymnastics, cuando las víctimas revelaron que le habían contado sobre el abuso a adultos y entrenadores, sino también al FBI, ya que no tomó en serio las acusaciones y dejó que Nassar abusara de más de 120 víctimas más mientras la información acumulaba polvo durante año y medio.

Era julio de 2015 cuando Maggie Nichols se convirtió en la primera víctima en denunciar su abuso sexual a los jefes de USA Gymnastics, quienes luego pasaron la información a la oficina local del FBI en Indianápolis.

W. Jay Abbott, quien ese entonces era el agente especial a cargo de la oficina del FBI en Indianápolis, renunció en 2017. Fue acusado de esperar cinco semanas antes de contarle al FBI sobre las primeras denuncias recibidas de US Gymnastics sobre el comportamiento de Nassar.

Los agentes no abrieron una investigación durante otros 17 meses cuando se presentó una denuncia sobre Nassar a la policía del campus de la Universidad Estatal de Michigan.

Más tarde, el organismo de control del Departamento de Justicia publicó un informe mordaz sobre el manejo del asunto por parte de la oficina, que dijo que permitió que el depredador sexual siguiera abusando de docenas de víctimas más.

Luego de su arresto en 2016, Nassar se declaró culpable de poseer material de abuso sexual infantil en diciembre de 2017 y fue sentenciado a 60 años de prisión.

Dos meses después, se declaró culpable de conducta sexual criminal en un juicio separado y fue sentenciado a entre 40 y 175 años de prisión. También está cumpliendo una sentencia separada de 40 a 125 años por abuso sexual en Michigan.

Durante su estancia tras las rejas, el delincuente sexual en serie ha tratado de luchar contra su larga condena, alegando que, en su juicio de 2018, el juez lo trató injustamente, ya que lo llamó “monstruo” y dijo que debería “marchitarse” en prisión como la bruja malvada de El mago de Oz.

La Corte Suprema de Michigan anuló su apelación final en junio de 2022.

Traducción de Michelle Padilla

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