Velocidad en carreteras de EEUU aumenta en pandemia

Los conductores pisaron el acelerador durante la pandemia y la policía está preocupada conforme las carreteras empiezan a estar más transitadas en la última fase de los viajes de verano.

Los datos más recientes muestran que el número de muertes en carreteras en 2020 fue el mayor en más de una década, a pesar de que automóviles y camiones recorrieron menos kilómetros durante la pandemia.

“El verano es una época increíblemente peligrosa. Y culmina con el Día del Trabajo, el último adiós”, dijo Pam Shadel Fischer de la Asociación de Gobernadores para la Seguridad en Carreteras.

Los datos de tránsito indican que la mayor tasa de muertes estuvo relacionada con velocidades promedio más elevadas, aunado a más personas conduciendo bajo la influencia de drogas y alcohol, y una ligera disminución en el uso de cinturones de seguridad.

Y parece que los conductores no reducen la velocidad.

“Las personas vuelan en las vialidades”, dijo el policía estatal de Maine Doug Cropper en relación al tránsito de verano en la Interestatal 95. “Es simplemente ridículo”.

Las multas emitidas por la Patrulla de Caminos de California por exceder los 160 kilómetros por hora (100 mph) de enero a junio prácticamente se duplicaron comparado con los niveles previos a la pandemia, y el número de multas por conducción temeraria también aumentó, informaron funcionarios.

En el estado de Nueva York el porcentaje de muertes en donde el exceso de velocidad fue la principal causa y el número total de multas por exceso de velocidad aumentó de enero a junio, comparado con el año previo a la pandemia, informaron funcionarios.

“Persiste la preocupación sobre el aumento de velocidad y conducción agresiva conforme llegamos al pico de la temporada de viajes vacacionales y mayor tránsito en las carreteras”, dijo Beau Duffy, vocero de la Policía Estatal de Nueva York.

El exceso de velocidad data de los primeros días de la pandemia.

Con la policía distraída por la desobediencia civil y con menos retenes rutinarios de seguridad, en muchos lugares las carreteras poco transitadas rápidamente se convirtieron en el salvaje oeste. En la ciudad de Nueva York, superautos como Ferraris y Lamborghinis volaban por calles vacías con el rugir de sus motores molestando a residentes que intentaban dormir. Conductores en todo el país fueron multados por conducir a velocidades espeluznantes.

Un residente de Maine usó un Ford Mustang GT rentado con tanques de combustible para 590 litros (130 galones) para establecer un récord de conducción solo de Nueva York a Los Ángeles en 25 horas, 55 minutos.

Fred Ashmore dijo que Nueva York era un “pueblo fantasma” cuando conducía a exceso de velocidad a principios de la pandemia, alcanzando los 255 km/h (159 mph) y con un promedio de 174 km/h (108 mph) en el viaje de 4.515 kilómetros (2.806 millas).

“No hay persona que nunca haya excedido el límite de velocidad”, comentó. “Yo sólo lo excedo más y más tiempo”.