Regular coca en Colombia, plantea Comisión Global de Drogas
Reformar la política de drogas en Colombia pasaría por dar un salto hacia la regulación legal de la hoja de coca y la cocaína cambiando totalmente el paradigma en el país que más la produce en el mundo, sugiere la Comisión Global de Políticas de Drogas en un nuevo informe
Reformar la política de drogas en Colombia pasaría por dar un salto hacia la regulación legal de la hoja de coca y la cocaína cambiando totalmente el paradigma en el país que más la produce en el mundo, planteó la Comisión Global de Políticas de Drogas en un informe divulgado el miércoles.
Con el reciente cambio de gobierno se avivó el debate sobre la estrategia antinarcóticos. El presidente Gustavo Petro -el primero de izquierda en Colombia- considera que la lucha contra las drogas “fracasó”, pero ha descartado legalizar la cocaína.
“Hay que regular el mercado, que en el fondo es legalizarlo”, dijo a The Associated Press el expresidente Juan Manuel Santos, premio Nobel de Paz y miembro de la Comisión Global de Políticas de Drogas.
Santos sabe porque lo enfrentó como mandatario del 2010 al 2018, que en Colombia hay sectores que se oponen tajantemente a la legalización de la droga. Aún así, propone que de manera gradual se regule la producción, comercialización y el consumo de las drogas, primero como un proceso interno en Colombia —cambiando la legislación— y simultáneamente haciendo una labor diplomática para conseguir apoyos a nivel internacional.
La estrategia antinarcóticos de Colombia ha estado muy ligada desde la década de 1980 a Estados Unidos, país que ha puesto sumas multimillonarias para combatir a los narcos e impulsó el “Plan Colombia”, un programa de asistencia militar. Sin embargo, el informe cuestiona que con la puesta en marcha del plan los niveles de violencia aumentaron en Colombia y no se acabó con la oferta.
“Todos esos recursos que se invirtieron en iniciar la aspersión (con el herbicida glifosato) de las matas de coca, en perseguir al narcotráfico, acabaron en la basura, porque seguimos siendo el primer productor y exportador de cocaína en el mundo”, cuestionó Santos.
En el 2021 los cultivos de coca en Colombia llegaron al nivel histórico de 204.000 hectáreas sembradas, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés). Esos cultivos ilícitos se siguen localizando en los mismos territorios históricamente afectados, en Nariño y Putumayo, fronterizos con Ecuador, y Norte de Santander, en la frontera con Venezuela.
El informe plantea que de acabar con la prohibición de la producción y comercialización legal de productos derivados de la hoja de coca -materia prima de la cocaína- se abrirían oportunidades económicas para los productores, que suelen ser campesinos en zonas rurales con grandes carencias que actualmente tienen cultivos de uso ilícito.
La propuesta la hace la Comisión Global de Políticas de Drogas, creada en 2011 por antiguos jefes de Estado para avivar el debate sobre las drogas. El informe fue presentado en Bogotá por los expresidentes Juan Manuel Santos, Ernesto Zedillo de México y Ruth Dreifuss de Suiza.
La Comisión lleva años insistiendo en que la guerra contra las drogas ha fracasado y en esta ocasión señala que Colombia ha sido uno de los países más perjudicados por el prohibicionismo punitivo que por décadas ha desatado en su territorio conflictos con grupos armados ilegales y poderosos cárteles del narcotráfico, afectando a la población civil.