Nueva erupción de volcán en San Vicente

El volcán La Soufriere tuvo el viernes una nueva erupción explosiva de gases y ceniza y un buque crucero arribó para evacuar a algunos de los extranjeros varados en San Vicente. La isla caribeña está cubierta de cenizas tras una semana de erupciones violentas.

Las explosiones que comenzaron el 9 de abril obligaron a unas 20.000 personas a huir del extremo norte y del agua contaminada.

La erupción del viernes por la mañana “no fue una gran explosión comparada con las que tuvimos el fin de semana pasada, pero sí lo suficientemente grande para atravesar las nubes”, dijo Richard Robertson, jefe científico del Centro de Investigaciones Sísmicas de la Universidad de Indias Occidentales, dijo en entrevista con la radio local NBC “Probablemente llegó a 8.000 metros”.

No se han reportado muertes entre una población que había recibido advertencias sobre el peligro inminente.

Turistas británicos, estadounidenses y canadienses eran evacuados en el buque Celebrity Reflection de la línea Royal Caribbean en el puerto de Kingstown, la capital de San Vicente y Granadinas. Tenía previsto arribar a la isla holandesa St. Maarten el sábado.

Decenas de extranjeros con su equipaje llegaron en autobuses de turismo y autos a la terminal portuaria y formaron una fila larga.

Entre los turistas varados, incluidas familias con niños en brazos, había estudiantes de la Facultad de Medicina de Trinity.

“En este momento nos están evacuando para nuestra seguridad y para mantener la isla lo más segura posible”, dijo LLeah Ransai, una estudiante canadiense en Trinity. “Entre la facultad, el gobierno y las embajadas de Estados Unidos y Canadá nos están evacuando ahora”.

La embajada estadounidense dijo que las personas a bordo deberían gestionar sus propios viajes a sus hogares. Dijo en un comunicado que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomendaron no viajar en cruceros debido al peligro de contraer COVID-19 y que la gente que estuvo en contacto con posibles enfermos del mal no podían abordar el buque. Todas las personas a bordo supuestamente dieron negativo en tests de antígeno en las 24 horas antes a abordar.

Mientras tanto, miles de habitantes estaban en refugios de emergencia sin saber cuándo podrían volver a sus casas.