México: buzos ayudarán a rescatar a mineros atrapados
Diez mineros permanecen atrapados en una mina de carbón del norte de México que se derrumbó la víspera mientras varios cientos de elementos militares y civiles intensificaban las labores de rescate y se esperaba el arribo de un grupo de buzos de las fuerzas especiales que se sumarán a las tareas de búsqueda
Diez mineros permanecían atrapados el jueves en una mina de carbón en el norte de México mientras varios cientos de agentes militares y civiles intensificaban las labores de rescate y se esperaba el arribo de un grupo de buzos que se sumarán a las tareas de búsqueda.
Los mineros quedaron atrapados en una mina del municipio de Sabinas, en el estado norteño de Coahuila, que se derrumbó la tarde del miércoles cuando los hombres se toparon con un área contigua llena de agua que al venirse abajo provocó una inundación.
Durante la conferencia presidencial matutina la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, informó que cinco mineros lograron escapar y fueron llevados a un centro de salud tras presentar lesiones. Tres aún permanecen hospitalizados.
El subsecretario de la Secretaría de la Defensa Nacional, general Agustín Rádiala Suástegui, explicó que los mineros se encuentran atrapados entre dos pozos de carbón que están a 60 metros de profundidad, los cuales están inundados con 34 metros de agua.
Como parte de las labores de rescate las fuerzas de seguridad están realizando trabajos de desagüe y bombeo de los pozos.
En las próximas horas se espera el arribo al lugar de una aeronave de la Guardia Nacional con seis buzos de las fuerzas especiales que se espera que puedan ingresar a los pozos cuando se den “las condiciones favorables” para rescatar a los mineros, informó el oficial.
Unos 269 agentes de las fuerzas militares y otros cuerpos de seguridad participan las labores de rescate.
“Deseo con toda mi alma que rescatemos a los mineros”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador al final de su conferencia matutina en la que pidió a diferentes organismos que informen si disponen de bombas grandes de extracción de agua para enviarlas a Coahuila y apoyar las acciones en la mina.
López Obrador aprovechó para enviar un mensaje a los familiares de los mineros a quienes dijo “no hay que perder la fe, no hay que perder la esperanza... no están solos”.
El gobernante dijo que la prioridad es rescatar a los mineros y que luego se investigarán los permisos de explotación y las inspecciones para determinar las responsabilidades.
La mina inició operaciones en enero de este año y, según el gobierno local, no hay antecedentes de denuncias por algún tipo de anomalía.
Entre junio y julio del año pasado se registraron derrumbes en dos minas de Coahuila en los que perecieron nueve mineros.
El peor accidente minero en la historia reciente de México también ocurrió en ese estado, la madrugada del 19 de febrero de 2006. Hubo una explosión en la mina Pasta de Conchos cuando 73 mineros estaban de turno. Ocho fueron rescatados con golpes y quemaduras graves y los demás murieron. Sólo se recuperaron los cadáveres de dos de ellos.
Hace dos años el actual gobierno se comprometió a rescatar los cuerpos de los mineros sepultados, un trabajo de gran complejidad técnica y alto costo que todavía no ha comenzado.