Italia: Berlusconi se retira de contienda presidencial

El ex primer ministro Silvio Berlusconi anunció el sábado que se retira de la contienda presidencial de Italia programada para la próxima semana, y afirmó que tenía los votos para ganar, pero que el país no puede permitirse divisiones durante la pandemia.

Berlusconi dijo asimismo que se opone, junto con sus aliados del bloque de centro derecha, a que el primer ministro Mario Draghi busque el cargo. Draghi, extitular del Banco Central Europeo encabeza ahora un gobierno de unidad por la pandemia con amplio respaldo político.

En conjunto, Berlusconi, el dirigente de la Liga, Matteo Salvini, y la dirigente de los Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, podrían controlar a unos 400 de los 1.009 grandes electores que comenzarán a emitir los votos escritos para la elección del próximo presidente el lunes.

Los electores de la cámara baja del parlamento italiano, el Senado y representantes regionales especiales tienen la tarea de elegir a una personalidad que pueda unir al país.

Berlusconi, de 85 años, fundador del partido de centro derecha Forza Italia hace tres décadas y tres veces primer ministro, ha sido un pararrayos de protestas. Su historial incluye una condena por fraude fiscal y varios escándalos sexuales, mientras que su imperio de negocios que incluye tres estaciones privadas de televisión planteó inquietudes de conflictos de interés.

Sondeó durante semanas a sus aliados conservadores así como a legisladores de las fuerzas de centro para ver si tenía suficiente apoyo a fin de agregar a su hoja de vida el máximo cargo de Italia.

La posibilidad de que Berlusconi se convirtiera en presidente ya provocó una protesta a principios de mes en Roma y una más está prevista para el lunes, cuando comienza la votación.

Al anunciar su retiro de la contienda presidencial, Berlusconi señaló que había confirmado que tenía suficiente apoyo para ser elegido al cargo de presidente durante siete años. Señaló que se sentía “honrado y conmovido”, pero que no quería ser la causa de “polémicas ni laceraciones” en una nación que continúa atravesando apuros debido a la pandemia de COVID-19.