Horschel asegura con eagle la victoria en Memorial

Billy Horschel terminó con cualquier duda sobre su victoria en Muirfield Village con un putt para eagle de un extremo al otro del green en el hoyo 15, que lo envió al triunfo por cuatro golpes el domingo en el Memorial.

Horschel apostaba a una ventaja de cinco golpes en el inicio de la ronda final bañada por el sol y nadie se le acercó a menos de dos golpes. Cerró con 72 golpes, para par de campo.

Hubo algunos momentos de nervio.

La racha de Horschel de 49 hoyos seguidos sin bogey llegó a su fin en el hoyo seis. No consiguió su primer birdie sino hasta el hoyo 10. Tuvo que batallar para lograr bogey en el hoyo 12, par 3, que redujo a dos su ventaja sobre Aaron Wise.

Antes del largo eagle, Horschel se salvó con un par de putts de 12 pies en el hoyo 13 y de 8 pies en el 14.

Y fue cuando todo terminó. Desde el frente del green en el hoyo 15, par 5, el putt de Horschel desde 16,7 metros (55 pies) tuvo una línea perfecta y la velocidad ideal, doblando a la izquierda y cayendo en el lado izquierdo de la copa, mientras alzaba los brazos en silencio en una celebración tranquila e incrédula.

“Justo como usted, gran hombre”, le dijo Horschel al anfitrión Jack Nicklaus cuando todo terminó.

Su ventaja era de cuatro golpes y fue un final cómodo. Horschel terminó con 275 golpes, 13 bajo par, y ganó 2,16 millones de dólares, el mayor cheque de su carrera. Como cualquier torneo grande, la victoria le representa una exención de tres años.

Horschel dijo que aprendió de Tiger Woods y Nicklaus que no necesitaba hacer nada especial con una ventaja de cinco golpes, a menos que el momento así lo pidiera. Lo hizo en el hoyo 15 cuando Wise embocó desde 2 pies para lograr birdie.

“Si tenía que hacer algo especial, estaba listo para ello”, dijo. “Y conseguirlo fue enorme”.

Wise hizo lo que pudo en una ronda final tan difícil, que nadie mejoró los 69 golpes. Él y Joaquin Niemann fueron los únicos en poner algo de presión en Horschel.