Harper jugará al fin Serie Mundial; Trout sigue esperando
El recorrido de Bryce Harper, desde que era un adolescente que causaba sensación hasta que se convirtió un uno de los mayores astros del béisbol, ha durado 11 años antes de un momento de clímax, que llegó el domingo por la noche, cuando su jonrón de dos carreras en el quinto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional colocó a los Filis de Filadelfia en su primera Serie Mundial desde 2009
El recorrido de Bryce Harper, desde que era un adolescente que causaba sensación hasta que se convirtió un uno de los mayores astros del béisbol, ha durado 11 años antes de un momento de clímax, que llegó el domingo por la noche, cuando su jonrón de dos carreras en el quinto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional colocó a los Filis de Filadelfia en su primera Serie Mundial desde 2009.
Una de las mayores figuras de este deporte ha llegado finalmente a la instancia más importante.
Mike Trout, otro de los máximos ídolos, sigue esperando.
Las carreras de ambos se han entreverado desde que eran adolescentes, cuando Sports Illustrated consideró que Harper era “el elegido del béisbol” y Trout comenzó a ser comparado con Mickey Mantel.
Los dos suscitaban expectativas muy elevadas antes de llegar incluso a una alineación de un equipo de las Grandes Ligas. Se les consideraba los siguientes superastros.
De algún modo, Harper y Trout han cumplido con lo que se pronosticaba.
Son ahora peloteros maduros, de poco más de 30 años y con trayectorias que podrían llevarlos al Salón de l Fama. Harper es uno de los toleteros más temidos de las mayores. Trout patrulla el jardín central de los Angelinos de Los Ángeles, quizá como el jugador más completo de la última década.
Trout ha dominado largamente el debate acerca de cuál de los dos jugadores es mejor. Pero Harper tiene ahora un logro que no figura en el currículum de Trout —un momento glorioso en octubre.
Gracias a su cuadrangular del domingo, los Filis viajan para enfrentar a los Astros el viernes, en el primer juego de la Serie Mundial.
“En este deporte, la gente se pregunta: ‘¿qué has hecho por mí recientemente?’”, dijo Harper al hablar del recorrido de los Filis en esta campaña. “Así ha sido siempre".
A juzgar sólo por los números, Trout tiene ventaja en la mayoría de las categorías.
Se le ha elegido tres veces el Jugador Más Valioso de la Liga Americana. Harper ha obtenido dos veces ese premio en la Liga Nacional.
Trout ha llegado 10 veces al Juego de Estrellas, mientras que Harper ha disputado siete.
Al analizar los complicados cálculos de la sabermetría, baseball-reference.com dice que Trout suma 82,4 victorias por encima del reemplazo en sus 12 temporadas. La cifra de Harper es de 42,5 en 11 campañas.
Y si se prefiere tomar como criterio los dólares, Harper estableció un récord de todos los deportes profesionales en Estados Unidos y Canadá al firmar como agente libre con los Filis en 2019 por 330 millones de dólares y 13 años. Luego, trató sin éxito de convencer a Trout para que se le uniera en Filadelfia.
En vez de ello, Trout extendió su acuerdo con Los Ángeles por 10 años y 360 millones de dólares, para rebasar el récord de Harper.
Sería injusto culpar a Trout por las penurias de los Angelinos, pero el éxito reciente de Harper resalta lo ajena que ha sido la postemporada a Trout. Incluso en un año en que el 40% de los clubes de las mayores avanzó a los playoffs, Los Ángeles quedó eliminado tras la campaña regular, con una foja decepcionante de 73-89.
Durante años ha sido un enigma el motivo de los fracasos de los Angelinos, que han colocado a varios astros al lado de Trout durante su carrera. Actualmente, está junto a él Shohei Ohtani, el mejor para mostrar simultáneamente virtudes de pitcher y bateador desde Babe Ruth.
“Tenemos a dos de los mejores peloteros que hayan vestido los uniformes en la historia, pero necesitamos más”, dijo recientemente Perry Minasian, gerente general de los Angelinos. “No es un juego de dos contra dos. Si lo fuera, me encantarían nuestras probabilidades”.
Trout ha jugado sólo una postemporada, la de 2014. Los Angelinos fueron barridos en la serie divisional de la Liga Americana y Trout se fue de 12-1, aunque su único hit fue un cuadrangular.
En retrospectiva, hubo una racha profética de juegos esta temporada, en junio. Los Filis de Harper barrieron a los Angelinos de Trout en una serie de tres duelos.
Ése fue el comienzo de un ascenso de Filadelfia que culminó con su inesperado viaje a la Serie Mundial.
Los Angelinos estaban empantanados en una racha de 14 derrotas en ese momento y continuaron derrumbándose, en una campaña en la que Trout eventualmente se lesionó. Sus problemas de espalda este año constituyeron un recordatorio sobre la fragilidad de la carrera de un deportista profesional: Pese a lo maravilloso que es, el astro de 31 años no seguirá aportando por siempre estadísticas dignas del Jugador Más Valioso.
“Estoy haciendo todo lo que puedo para mantenerme en el terreno, pero surgen cosas”, dijo Trout. “Juego duro”.
Es imposible saber si los Angelinos competirán pronto por un campeonato. La nómina ha sido siempre competitiva bajo las órdenes del dueño Arte Moreno, quien ahora explora sin embargo la venta del equipo, lo que genera más incertidumbre.
“Confío en que Perry traerá acá un equipo ganador”, dijo Trout. “Insiste en ello cada año, desde que nos eliminaron (de los playoffs). Busca traer acá a un gran grupo para competir”.
La buena noticia para Trout es que la suerte en postemporada puede cambiar rápidamente. Harper dejó atrás una sequía de cuatro años sin playoffs, de 2018 al 21, antes de conducir a los Filis a la Serie Mundial este año.
Por su parte, Harper y Trout se profesan respeto mutuo. En junio, Trout se había ido de 11-0 en tres juegos cuando ambos equipos se enfrentaron, Harper dijo que la mala racha no duraría.
“Pienso que todos pasamos por rachas así”, dijo Harper al diario Los Angeles Times. “Yo las he tenido en mi carrera. Él es uno de los mejores de la historia. Todos saben lo bueno que es”.
“Él saldrá de esto y, para finales del año, nadie pensará siquiera en esta racha que atraviesa. Será el mismo Mike Trout y bateará para .300 con 40 jonrones”.
Prácticamente Harper tenía razón. Trout finalizó con un promedio de .283 y 40 vuelacercas pese a los problemas en la espalda. Continuó así con una carrera que puede considerarse entre las mejores de la historia.
Ahora, los fanáticos esperan ver un éxito semejante en los playoffs algún día.