Georgianos votan en importantes comicios municipales

Los georgianos votaron el sábado en elecciones municipales en todo el país que son consideradas una prueba de la fuerza del partido gobernante y de cuáles partidos opositores pudieran tener esperanzas de llevar a una elección nacional adelantada.

La votación del sábado se produjo un día después del arresto del expresidente Mikheil Saakashvili, que había regresado al país para tratar de fortalecer el respaldo a la oposición pese a enfrentar prisión por cargos de abuso de poder que fueron declarados después que él se fue de Georgia.

Los sondeos mostraron que más de la mitad del electorado en la exrepública soviética estaba indeciso entre el partido gobernante Sueño Georgiano y el opositor Movimiento Nacional Unido fundado por Saakashvili.

Dos horas después del cierre de las casillas, aún no han sido anunciado resultados preliminares. Se espera que los resultados oficiales sean dados a conocer el domingo.

Una actuación sólida de la oposición podría aumentar las tensiones en el país si los georgianos esperan que eso lleve a elecciones nacionales adelantadas.

En abril, la Unión Europea auspició un acuerdo para resolver la crisis política entre el partido de gobierno y grupos opositores, incluso el Movimiento Nacional Unido.

El acuerdo estipula que deben convocarse elecciones parlamentarias adelantadas en 2022 si Sueño Georgiano recibe menos del 43% de todos los votos proporcionales en las elecciones locales en las 64 municipalidades del país.

Sin embargo, no está claro si se respetará el acuerdo. En julio, Sueño Georgiano se retiró del acuerdo porque el Movimiento Nacional Unido no lo había firmado entonces. El mayor partido opositor lo firmó finalmente en septiembre y Saakashvili había llamado a sus partidarios a acudir a las urnas.

Saakashvili, que salió de Georgia en 2014 y obtuvo la ciudadanía ucraniana, fue arrestado horas después de que colocó videos en Facebook anunciando que estaba en el país. En los mensajes, Saakashvili calificó las elecciones del sábado de “cruciales” para Georgia y convocó a un acto político en Tiflis el domingo, diciendo que asistiría.

La presidenta Salome Zurabishvili, exaliada de Saakashvili que fue su primera ministra de Relaciones Exteriores, dijo el viernes que no considera ofrecerle un perdón.