GBretaña honra a migrantes que ayudaron a construir el país
La reina Isabel II y su nieto el príncipe Guillermo rinden homenaje a los inmigrantes caribeños por su “profunda contribución” a Gran Bretaña, al tiempo que se devela un monumento en Londres en agradecimiento a los migrantes por el trabajo que hicieron para reconstruir al país después de la Segunda Guerra Mundial
La reina Isabel II y su nieto el príncipe Guillermo rindieron homenaje el miércoles a los inmigrantes caribeños por su “profunda contribución” a Gran Bretaña, al tiempo que se develó un monumento en Londres en agradecimiento a los migrantes por el trabajo que hicieron para reconstruir al país después de la Segunda Guerra Mundial.
Guillermo y su esposa Kate develaron la estatua -- con las figuras de un hombre, una mujer y un niño de pie sobre maletas — en la estación de trenes Waterloo de Londres. En su discurso, Guillermo resaltó el racismo que muchos de los migrantes enfrentaron en Gran Bretaña, afirmando que ello todavía afecta a sus descendientes hasta el día de hoy.
“La discriminación sigue siendo una experiencia sumamente común para hombres y mujeres de raza negra en Gran Bretaña en el 2022”, expresó el príncipe.
Guillermo hizo referencia a un escándalo que “constituyó una profunda injusticia” contra miles de inmigrantes que llegaron a Gran Bretaña entre 1948 y 1973 luego que el gobierno pidió a las colonias enviar trabajadores debido a la escasez de mano de obra en la posguerra. Los inmigrantes llegaron a conocerse como “la generación Windrush” por el nombre del barco que trajo al primer grupo en 1948, el Empire Windrush.
En el 2018 se reveló que miles de migrantes caribeños que durante décadas vivieron y trabajaron legalmente en Gran Bretaña fueron afectados por nuevas normas que buscaban combatir la inmigración ilegal.
Una gran número de personas perdieron sus empleos, viviendas y acceso a atención médica por no tener los documentos que comprobaban su estatus. Algunos fueron detenidos y deportados a países que apenas recordaban.
El gobierno británico expresó sus disculpas y ofreció compensación, pero muchos denuncian que el proceso para obtener el resarcimiento es demasiado complicado y que los pagos no alcanzan para compensar los daños sufridos.
“Al mismo tiempo que celebramos la diversidad de nuestras familias, nuestras comunidades y de la sociedad en su totalidad — algo a lo que la generación Windrush contribuyó tanto — es importante también reconocer las maneras en que el futuro que ellos buscaban y merecían no ha llegado todavía”, declaró Guillermo.
La reina, por su parte, emitió una declaración escrita diciendo que la estatua “es un agradecimiento apropiado a los pioneros del Windrush y sus descendientes, en reconocimiento de la profunda contribución que han hecho al Reino Unido a través de las décadas”.