Gabinete de Japón aprueba paquete de gastos contra inflación
El gabinete japonés aprueba un fuerte paquete económico que incluye 29 billones de yenes (200.000 millones de dólares) en gastos gubernamentales para contrarrestar los efectos de la inflación en los hogares, indicando que la mayor preocupación de los que elaboran las medidas económicas es que la economía se estanque, no que se sobrecaliente
El gabinete japonés aprobó el viernes un fuerte paquete económico que incluye 29 billones de yenes (200.000 millones de dólares) en gastos gubernamentales para contrarrestar los efectos de la inflación en los hogares, indicando que la mayor preocupación de los que elaboran las medidas económicas es que la economía se estanque, no que se sobrecaliente.
Mientras los bancos centrales en el mundo están elevando sus tasas de interés para frenar una inflación que ha alcanzado sus mayores niveles en décadas, Japón, con su propia inflación cerca de 3%, se ha atenido a usar medidas fiscales o gastos gubernamentales para combatir el problema.
El Banco de Japón resaltó esa posición cuando, al concluir una reunión el viernes, mantuvo su tasa referente en menos 0,1%.
En Estados Unidos, la Reserva Federal ha estado subiendo sus tasas agresivamente para combatir la inflación, elevándolas cinco veces este año. Se apresta a hacerlo de nuevo la semana próxima y en diciembre, al tiempo que advirtió que los aumentos casi seguramente crearán desempleo y posiblemente recesión.
Según el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, se espera el monto general del paquete de estímulo, incluyendo fondos para el sector privado y medidas fiscales, alcance 71,6 billones de yenes y que estimule el crecimiento económico por 4,6%.
“Las medidas económicas fuero diseñadas para sobreponerse al aumento de los precios y conseguir una recuperación económica”, dijo Kishida en conferencia de prensa televisada. “Vamos a proteger las vidas, los empleos y los negocios y fortalecer la economía para el futuro”.
El paquete de gastos de 29 billones de yenes será parte de un presupuesto suplementario que necesita aún la aprobación del parlamento. Incluye unos 45.000 yenes (300 dólares) en subsidios para las cuentas de electricidad y gas en los hogares y cupones de 680 dólares para las mujeres embarazadas o con bebés.
Kishida prometió compilar y presentar un plan presupuestario y conseguir su aprobación lo más pronto posible.