Dressel y McKeon bajo el foco en último día de la natación
La estrella estadounidense Caeleb Dressel sigue teniendo opciones de ganar cinco oros
La estrella estadounidense Caeleb Dressel sigue teniendo opciones de ganar cinco oros. La australiana Emma McKeon podría entrar también en la historia olímpica.
El último día de la natación en el Centro Acuático de Tokio estará repleta de historias, protagonizadas por las dos superpotencias de la disciplina.
Dressel es el favorito para sumar su tercer oro individual en la final de 50 metros libres el domingo, antes de que los nueve días de competición en la piscina olímpica terminen con el relevo masculino de 4x100 estilos, una prueba en la que los estadounidenses no han pedido nunca en unas justas de verano.
El intento de Dressel de colgarse seis oros terminó con el fiasco de Estados Unidos en los 4x100 estilos mixtos, una prueba que debutaba el sábado en el programa y en la que acabaron quintos.
Pero el paso de Dressel por Tokio le ha reportado más éxitos que disgustos. Calificado como el sucesor de Michael Phelps ha estado a la altura de las expectavitas con tres oros — y un récord del mundo en los 100 metros mariposa — y la posibilidad de conquistar dos más.
Si lo consigue, se unirá a los estadounidenses Michael Phelps, Mark Spitz y Matt Biondi y a la alemana Kristin Otto como los únicos nadadores con al menos cinco preseas doradas en la misma cita olímpica. Phelps, por supuesto, repitió la gesta tres veces.
McKeon podría marcharse de Tokio con más medallas que Dressel. Ya tiene cinco — dos oros y tres bronces — a falta de dos pruebas.
Es la rival a batir en los 50 metros libres y estará en el equipo australiano del relevos 4x100 estilos que tratará de derrocar a las actuales campeonas, las estadounidenses.
Si prospera en las dos competiciones, será la primera mujer con siete medallas en natación en unos Juegos.
Estados Unidos llega a la última jornada en la piscina por delante de Australia en el medallero de la disciplina, con 26 medallas frente a 18. Pero tienen la mitad de oros (8) que tenían en Río hace cinco años (16), y posiblemente no alcanzarán el botín de entonces, 33 preseas, a pesar de las tres nuevas pruebas que le reportaron dos oros.
Aunque el rendimiento de Dressel fue estelar, el equipo sufrió algunos reveses de calado: Katie Ledecky perdió dos veces ante la australiana Ariarne Titmus, la primera que logró derrotarla en unos Juegos; Simone Manuel, una de las mayores estrellas en Río, se clasificó solo para una prueba individual y no entró en la final, y no subieron al podio en dos de los relevos.