Culpan a exanimador de asesinar tres prostitutas en Florida
Culpan a exanimador deportivo universitario de asesinar tres prostitutas en Florida
Un exespecialista en justicia penal y exanimador deportivo universitario fue condenado por los asesinatos de tres prostitutas de Florida hace más de 15 años.
El jurado deliberó durante más de ocho horas antes de emitir el veredicto de culpabilidad contra Robert Hayes, a quien las pruebas de ADN vincularon con las tres víctimas después de otro asesinato en el condado de Palm Beach, donde él había trabajado como chef hasta su arresto en 2019.
Hayes, de 39 años, no mostró ninguna reacción cuando el secretario del proceso leyó el veredicto del jurado el martes por la noche, informó el diario The Daytona Beach News-Journal. Los fiscales buscarán la pena de muerte durante la fase de condena, que comienza la semana próxima.
Hayes se graduó en 2006 de la Universidad Bethune-Cookman en Daytona Beach. Las víctimas fueron encontradas muertas en la ciudad en su último año en la universidad.
El cuerpo de Laquetta Gunther, de 45 años, fue encontrado en un espacio entre una tienda de autopartes y un edificio de servicios públicos casi vacío alrededor de la Navidad de 2005. El cadáver de Julie Green, de 34 años, fue hallado el 14 de enero de 2006 en un camino de tierra en un sitio de construcción. El cuerpo de Iwana Patton, de 35 años, fue encontrado el 24 de febrero en un camino de terracería. Todos estaban desnudos, acostados boca abajo, con disparos en la cabeza.
Las muertes causaron un pánico generalizado entre los trabajadores sexuales del área de Daytona Beach, lo que provocó que algunos trabajaran con los investigadores para memorizar placas y descripciones de vehículos.
Hayes también está acusado del asesinato de Rachel Bey, de 32 años, una prostituta cuyo cuerpo fue encontrado, estrangulado y con la mandíbula y los dientes rotos, el 7 de marzo de 2016, cerca de la localidad de Jupiter, en el condado de Palm Beach. Pasaron tres años más antes de que los investigadores dijeran que el ADN recuperado de los cuatro asesinatos los llevó a arrestar a Hayes en su casa en West Palm Beach.
Años antes, las autoridades que investigaban los asesinatos en Daytona Beach interrogaron dos veces a Hayes, pero no lo arrestaron, ya que investigaron a todas las personas de la zona que habían comprado recientemente una pistola calibre .40, similar a la que se usó contra las tres primeras víctimas, informó el periódico. La policía dijo que Hayes compró el arma en 2005, poco antes de que fuera asesinada la primera víctima.