Cientos se despiden del compositor griego Theodorakis
Cientos de personas se han reunido fuera de la catedral de Atenas para despedir al compositor y político griego Mikis Theodorakis, cuyos restos permanecerán en la capilla de la catedral por tres días antes de su entierro en la isla sureña de Creta
Cientos de personas, algunas con flores, se reunieron el lunes en la catedral de Atenas para dar el último adiós al compositor y político griego Mikis Theodorakis, quien por décadas formó parte integral de la política y la música griega.
Los restos de Theodorakis, quien falleció el jueves a los 96 años, permanecerán en la capilla de la catedral por tres días antes de su entierro en la isla sureña de Creta. Su ataúd llegó el lunes después de casi dos horas de retraso en medio de una disputa sobre los detalles de su entierro.
Al parecer durante el fin de semana su familia dejó de resistirse a que fuera enterrado en Creta, cumpliendo con sus últimos deseos. Un tribunal había detenido temporalmente los planes de su entierro para que se resolviera la disputa.
Su hija había dicho que sería enterrado cerca de Corinto en el pueblo de Vrahati, donde tenía su casa de vacaciones. Pero en una carta de 2013 hecha pública, Theodorakis escribió al alcalde del pueblo de Chania en Creta que quería ser enterrado en el cercano cementerio de Galatas, a pesar de la oposición de su familia.
Theodorakis era famoso en Grecia por su activismo político y su carrera musical. Creó una amplia obra, de sinfonías sombrías a populares bandas sonoras de televisión y cine, incluyendo la música de “Serpico” y “Zorba el griego”.
También es recordado por su oposición a la junta militar que gobernó Grecia de 1967 a 1974, una época en la que fue perseguido y encarcelado, mientras que su música fue prohibida.
El Partido Comunista de Grecia dijo durante el fin de semana que el cuerpo de Theodorakis estará presente a partir del lunes y que se realizará una “ceremonia de despedida” el miércoles antes de que los restos del compositor sean llevados por avión a Creta. La misa y el entierro se harán el jueves.
Theodorakis tuvo una relación tumultuosa con el Partido Comunista, conocido por su acrónimo griego como KKE. Salió del partido a finales de la década de 1960, reingresó a finales de los años 70 y fue elegido legislador con el partido conservador Nueva Democracia en 1990.
En octubre escribió una carta al secretario general del Partido Comunista Dimitris Koutsoumbas, en la que esencialmente le confiaba los arreglos de su funeral.
“Ahora, al final de mi vida, en una época de recuentos los detalles se han borrado de mi mente y ‘las cosas grandes’ permanecen. Me doy cuenta que pasé mis años más cruciales, enérgicos y maduros bajo la bandera del KKE. Por ese motivo quiero partir de este mundo como un comunista”, escribió Theodorakis.