Bomberos cerca de acorralar enorme incendio en Nuevo México

Bomberos de Nuevo México aprovecharon el jueves la disminución de los vientos para construir más brechas cortafuego y despejar la maleza combustible a los alrededores de las casas cercanas al incendio forestal activo más grande en Estados Unidos.

Las medidas se realizaron antes de lo que se espera que sean varios días consecutivos de calor intenso, clima árido y extremadamente ventoso que amenazan con avivar las llamas.

El fuego ha consumido 669 kilómetros cuadrados (258 millas cuadradas) de bosques alpinos altos y pastizales en el extremo sur de las Montañas Rocosas, destruyendo decenas de hogares y provocando la evacuación de miles de familias, muchas de las cuales consideran a las Montañas Sangre de Cristo su hogar desde que sus antepasados ​​españoles se establecieron en la región hace siglos.

El presidente Joe Biden aprobó una declaración de desastre que libera recursos económicos adicionales para las áreas que han sido devastadas por el fuego desde principios de abril. La ayuda incluye subvenciones para vivienda temporal y préstamos de bajo costo para cubrir las pérdidas de propiedades no aseguradas y otros programas de ayuda para personas y empresas.

Las evacuaciones, que han durado semanas, han tenido un costo físico y emocional para los residentes. Las escuelas de la zona cancelaron clases durante toda la semana, algunos negocios en la pequeña ciudad de Las Vegas cerraron debido a la escasez de personal y algunos clientes de la cooperativa eléctrica que brinda servicio a las áreas circundantes no han tenido energía eléctrica desde hace semanas.

El jefe policial del condado de San Miguel, Chris Lopez, dijo que se llevó a la zona una flota de aeronaves y demás equipamiento para acorralar las llamas y aseveró que “estamos listos para cualquier cosa que venga”.