Argentina pide a Moscú detención de iraní acusado de ataque
La justicia argentina pide a Moscú la detención con fines de extradición del funcionario iraní Mohsen Rezai, acusado de ser uno de los autores intelectuales del atentado a un centro judío en Buenos Aires en 1994, ante la sospecha de que se encuentre en Rusia
La justicia argentina pidió a Moscú la detención con fines de extradición del funcionario iraní Mohsen Rezai, acusado de ser uno de los autores intelectuales del atentado a un centro judío en Buenos Aires en 1994, ante la sospecha de que se encuentre en Rusia.
La orden contra Rezai, sobre quien pesa una orden de captura con alerta roja de Interpol, fue dada la víspera por el juez federal Marcelo Martínez De Giorgi, que hizo lugar a un pedido de la Unidad Fiscal que se dedica a investigar el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), el cual generó 85 muertos.
El embajador argentino en Moscú, Eduardo Zuain, dijo el viernes que el pedido formal para la detención de Rezai -vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán- tramitado desde la embajada ya fue enviado a la Cancillería rusa. El iraní era comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán cuando en julio de 1994 se produjo la voladura de la AMIA.
Zuain agregó que hay una política constante de Argentina para sostener las alertas rojas de Interpol que pesan sobre Rezai para que puedan ser cumplidas cada vez que uno de los imputados en esta causa entren a otro país.
Irán niega su responsabilidad por el ataque, por el cual la justicia argentina imputó a ocho exdiplomáticos y exfuncionarios iraníes y a un integrante del grupo libanés y pro-iraní Hezbollah Sobre cinco de ellos pesan alertas rojas de Interpol.
El pedido de detención de Rezai se produce pocas semanas antes de la visita oficial del presidente argentino Alberto Fernández a Moscú, prevista para el 3 de febrero.
Tiene lugar además luego de la cuestionada participación del funcionario iraní en el acto de asunción del presidente de Nicaragua Daniel Ortega, el 11 de enero en Managua, tiempo durante el cual las alertas rojas de Interpol no se activaron y no se llevó a cabo ningún procedimiento para detenerlo. Esto determinó que la Cancillería argentina pidiera a todas las embajadas especial atención respecto de quienes tienen pedidos de captura internacional.
Cuando las autoridades argentinas tomaron conocimiento del posible viaje de Rezai a Rusia, se procedió a informar a la justicia.
La presencia de Rezai en el acto de asunción de Ortega -cuestionado a su vez por distintos países que consideran que no respeta la democracia - generó un revuelo que se acrecentó cuando se supo que en el mismo también participó el embajador argentino en Managua, Daniel Capitanich. Diputados de la oposición argentina y familiares de las víctimas del atentado criticaron fuertemente lo que consideraron una falta de reacción del diplomático ante la presencia de un funcionario iraní acusado del ataque.
Días después de que la cancillería argentina rechazara la presencia de Rezai en Managua, el país sudamericano y Estados Unidos presentaron una declaración conjunta que fue aprobada por más de una decena de países en el marco del Comité Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) en la que condenaron la visita del funcionario iraní y pidieron que se reactiven las alertas rojas en todas las naciones para que la Interpol actúe contra los acusados del ataque. Dicha presentación fue criticada por representantes de Nicaragua.