Antorcha olímpica inicia acortado recorrido antes de Juegos
El relevo de la antorcha de los Juegos de Invierno de Beijing, acortado considerablemente a tres días por la pandemia del coronavirus, arranca con un expatinador de velocidad de 80 años como primer portador de la llama olímpica
El relevo de la antorcha de los Juegos de Invierno de Beijing acortado considerablemente a tres días por la pandemia del coronavirus, arrancó el miércoles con un expatinador de velocidad de 80 años como primer portador de la llama olímpica.
El recorrido comenzó en el Parque Olímpico y Luo Zhihuan, el primer patinador de velocidad profesional del país, cubrió el primer tramo.
La antorcha recorrerá las tres zonas olímpicas, empezando por el centro de Beijing, antes de dirigirse al distrito de Yanqing y finalmente a Zhangjiakou, en la vecina provincia de Hebei.
Los Juegos de Invierno de Beijing han sufrido ya un impacto similar al que experimentaron los de Tokio el verano pasado. China dijo que solo espectadores seleccionados podrán entrar a las competiciones, y los deportistas, árbitros, personal y reporteros deben mantenerse en una burbuja que les impide entrar en contacto con la población general.
Beijing, con 20 millones de habitantes, ha registrado apenas un puñado de contagios de COVID-19 y reportó dos nuevos el miércoles. Sin embargo, en línea con la política de “tolerancia cero” del país hacia la pandemia, las estrictas normas exigen confinamientos y pruebas masivas de detección del virus cuando se descubre un caso real o sospechoso.
La reducción del relevo parecía afectar poco a Luo, quien tras recibir la antorcha de manos del viceprimer ministro Han Zheng, dijo que era la realización de un sueño de hacía décadas.
“Nunca he participado en unos Juegos de Invierno, así que tenía la esperanza de que nuestro país pudiese organizarlos y tuve ese sueño por casi 60 años", afirmó Luo, quien vestía una chaqueta roja y blanca con el número 1. “Hoy mi sueño se ha hecho realidad (...) ¡Qué feliz soy!".
La inauguración de los Juegos de Beijing el viernes se producirá apenas unos días después del Año Nuevo Lunar, la mayor fiesta del año en China, cuando millones de personas suelen viajar a sus localidades natales para reunirse con sus familias. Como desde el inicio de la pandemia, el gobierno aconsejó a quienes viven lejos que no se desplacen y los vuelos y viajes en tren se han reducido.
Los participantes en el relevo olímpico han pasado controles de salud y han estado controlados de cerca desde hace dos semanas.
Entre los 135 portadores de la antorcha estarán Jing Haipeng, capitán del Cuerpo de Astronautas de China; Ye Peijian, un consultor del programa de exploración lunar chino de 77 años; la exestrella de la NBA Yao Ming y el cineasta Zhang Yimou, quien dirigirá la ceremonia inaugural en el estadio el Nido.
Este relevo de bajo perfil dista mucho del de 2008, cuando Beijing envió la llama olímpica de un viaje por todo el mundo antes de albergar los Juegos estivales. El evento provocó protestas contra las violaciones de los derechos humanos en el país y las políticas en Tíbet, Xinjiang y en otras zonas, lo que derivó en confrontaciones violentas y en la cancelación de algunas etapas en el extranjero.
Los Juegos de Invierno se han visto asediados por las mismas controversias, además de por las preocupaciones sanitarias.
Hace seis semanas, Estados Unidos Gran Bretaña y varios aliados dijeron que no enviarían mandatarios a Beijing en protesta por los abusos de los derechos humanos por parte del régimen del Partido Comunista.
Los deportistas han sido amenazado por el comité organizador con “ciertos castigos” si dicen o hacen algo que ofenda a los anfitriones, mientras que varias delegaciones instaron a quienes viajen a la capital china a utilizar celulares desechables prepago en lugar de los suyos ante la preocupación de que su información personal pueda verse comprometida.