Aumenta capacidad de energía renovable, impulsada por auge solar y altos precios del combustible
El mundo apunta a registrar este año un récord en su capacidad de energía renovable, cuando tanto gobiernos como consumidores buscan compensar los altos precios de los combustibles y aprovechar el auge de la energía solar
El mundo apunta a registrar este año un récord en su capacidad de energía renovable, cuando tanto gobiernos como consumidores buscan compensar los altos precios de los combustibles y aprovechar el auge de la energía solar.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) dijo que los precios elevados de los combustibles fósiles —producto de la invasión rusa a Ucrania— y los temores por la seguridad energética provocaron la multiplicación de instalaciones de energía solar y eólica, que se prevé alcanzarán una capacidad de 440 gigavatios en 2023.
Es un tercio más que lo sumado el año pasado y eleva la capacidad global instalada a 4.500 gigavatios, aproximadamente la producción total de energía producida por Estados Unidos y China, informó la agencia con sede en París.
“La crisis energética global ha demostrado que los renovables son cruciales, no sólo para volver la provisión de energía más limpia, sino también más segura y accesible,” declaró el director ejecutivo de AIE, Fatih Birol.
“Los gobiernos responden con esfuerzos para instalarlas más rápidamente”, agregó. Los incentivos del gobierno del presidente Joe Biden para instalar generadoras de energía renovable ya han provocado un aumento significativo en Estados Unidos.
Aproximadamente dos tercios del aumento de la capacidad de energía renovable este año provendrá de la fotovoltaica (FV), con la multiplicación significativa tanto de granjas solares en gran escala como instalaciones en los techos de los consumidores.
La AIE dijo que también aumenta la capacidad de fabricación de componentes FV, sobre todo en China.
Pero Birol advirtió que es necesario actualizar y ampliar las redes eléctricas, teniendo en cuenta la naturaleza intermitente de la energía solar y eólica, que requiere un enfoque fundamentalmente diferente por parte de los operadores de redes en comparación con las plantas existentes a carbón, gas o nucleares.
Los expertos dicen que el objetivo de los acuerdos de París, de limitar la elevación de la temperatura desde la época preindustrial a 1,5 grados centígrados (2,7 Fahrenheit), requiere reducir las emisiones a la mitad para 2030 y a “cero neto” para mediados de siglo.
La Agencia Internacional de Energía Renovable (Irena, por su acrónimo en inglés) ha pedido un mayor aumento de las inversiones en energías solar y eólica. Los países discutirán una meta internacional para el desarrollo de la energía renovable en la conferencia climática de la ONU que este año se realizará en Dubái.