Marjorie Taylor Greene es suspendida de Facebook horas después de su expulsión de Twitter
La congresista afirma que los datos muestran que la vacuna contra el covid-19 no es segura
La cuenta de Facebook de Marjorie Taylor Greene, la congresista de derecha famosa por su apoyo a las teorías de conspiración sobre las elecciones de 2020, covid-19 y otros temas, fue suspendida temporalmente horas después de que su cuenta de Twitter fuera cancelada de forma permanente.
La congresista confirmó su suspensión en un post de Telegram, tras calificar la decisión de la compañía como “más allá de la censura de la expresión”.
Su suspensión parece deberse a la misma publicación que le valió el quinto y definitivo bloqueo de Twitter, que llevó a la desactivación de su cuenta: un post en el que afirmaba que los informes sobre lesiones y muertes por vacunas recogidos por un servicio de información operado por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) demostraban que el gobierno estaba ignorando un gran número de muertes derivadas de la vacuna contra el covid-19.
En realidad, los datos utilizados por la congresista en su post contenían informes anecdóticos no verificados por la FDA; los ensayos clínicos han demostrado que la vacuna puede tener efectos secundarios leves, y un puñado de efectos secundarios serios que son mucho más raros.
Greene publicó originalmente un mensaje en ambas plataformas en el que señalaba un gran número de informes de lesiones o muertes entre los receptores de la vacuna contra el covid-19 como prueba de que el gobierno federal estaba ignorando “cantidades extremadamente altas de muertes por la vacuna contra el covid-19”.
Los datos, aunque anecdóticos y no verificados por ninguna agencia gubernamental, se han convertido, sin embargo, en los favoritos de los teóricos de la conspiración antivacunas que intentan afirmar que las vacunas son más peligrosas de lo que dicen los médicos y los expertos federales en salud pública.
La publicación de la congresista en Twitter no es ni mucho menos la primera vez que difunde información errónea relacionada con el covid-19, y el año pasado recibió al menos dos suspensiones temporales por el mismo motivo. También fue sancionada por la compañía en enero de 2021 por difundir afirmaciones falsas sobre las elecciones de 2020.
“Hemos suspendido permanentemente la cuenta a la que hace referencia (@mtgreenee) por repetidas violaciones de nuestra política de desinformación de covid-19. Hemos dejado claro que, de acuerdo con nuestro sistema de advertencias para esta política, suspenderemos de manera permanente las cuentas por repetidas violaciones de la política”, declaró un portavoz de Twitter a The Independent el domingo.
Greene sigue teniendo acceso a Twitter a través de la cuenta de su oficina en el Congreso, @RepMTG, operada en gran medida por su personal. La cuenta suspendida el domingo era una cuenta personal de Twitter operada por la propia Greene. Twitter podría acabar adoptando medidas similares, tras emitir advertencias y después prohibir la cuenta de Twitter de la congresista Greene si esta siguiera difundiendo información errónea a través de esa cuenta.
La congresista respondió ayer a la noticia de su suspensión también en Telegram; la plataforma se está convirtiendo rápidamente en una de las favoritas de la derecha estadounidense.
“La congresista Maxine Waters puede salir a la calle y amenazar con la violencia en Twitter; Kamala [Harris] e Ilhan [Omar] pueden sacar de apuros a los terroristas de Black Lives Matter en Twitter; CNN y el resto de los medios de comunicación de propaganda demócrata pueden difundir mentiras sobre la colusión con Rusia; y ayer mismo el portavoz jefe del CGRI terrorista puede tuitear llorando a Soleimani, pero a mí me suspenden por tuitear estadísticas del VAERS”, escribió el domingo.
Los comentarios de Greene y de otros republicanos antivacunas han provocado una profunda división en el Partido Republicano, controlado por Trump, en el que el expresidente y otros líderes del partido han animado a sus partidarios a vacunarse, mientras que los miembros más derechistas de la Cámara han difundido una serie de falsedades sobre las vacunas en un intento de poner en duda su seguridad y eficacia.
Pocos días antes de la suspensión de Greene en Twitter, una cuenta de Twitter gestionada por los republicanos del Comité Judicial de la Cámara de Representantes se dedicó a un intento similar de echar por tierra las vacunas defendidas por Trump como parte de su iniciativa “Operation Warp Speed”.
La división sobre la aceptación de las vacunas se ha convertido ahora en uno de los cismas más significativos en el Partido Republicano tanto a nivel estatal como nacional, ya que algunos gobernadores republicanos como Asa Hutchinson de Arkansas y Larry Hogan de Maryland han aceptado por completo las vacunas, mientras que otros, como Ron DeSantis de Florida, siguen resistiendo la idea de incluso promover su eficacia contra el covid-19.