Ejecutivo que despidió a 900 personas en Zoom tiene historial de acusaciones de fraude y mala gestión
Las acusaciones de fraude y mala gestión financiera han seguido al director general por más de una década
Novecientos empleados de la compañía de hipotecas digital Better.com recibieron un regalo anticipado de Navidad no deseado: el desempleo. El anuncio de su despido fue hecho durante una llamada de Zoom (que ya se hizo viral) con el fundador y director general de la compañía, Vishal Garg.
Los empleados que estuvieron en la llamada dijeron que el anuncio duró en total alrededor de tres minutos, durante los cuales Garg explicó por qué estaba despidiendo al “desafortunado grupo” de trabajadores, “con efecto inmediato”.
“Esta es la segunda vez en mi carrera que hago esto, y no quiero hacerlo. La última vez lloré”, dijo Garg, de 43 años, durante la llamada.
Los empleados despedidos recibirán un mes de pago como indemnización, un mes de beneficios completos, y dos meses de cobertura durante los cuales Better.com pagara la prima.
La decisión de Garg de despedir a 900 personas justo antes de Navidad fue rápidamente recibida con críticas en las redes sociales, luego de que un empleado grabara y filtrara un video de la llamada.
El directivo provocó aún más ira entre el público tras la revelación de que el despido masivo sucedió un día después de que la compañía (que anunció en mayo que saldría a la bolsa en algún punto cerca del fin de año) recibiera una inyección de efectivo de US$750 millones por parte de sus patrocinadores SPAC.
Si bien los despidos son una desafortunada realidad para innumerables compañías, en este caso Garg tiene historial insultando a sus empleados y ha sido objeto de numerosas acusaciones de fraude y apropiación financiera indebida en sus empresas anteriores.
Garg se mudó de India a Queens, Nueva York, con su familia cuando tenía siete años. Durante una entrevista en un podcast en 2019, Garg reveló que su fascinación por los negocios comenzó durante la secundaria, cuando compraba CliffNotes y otros libros para revenderlos a sus compañeros, obteniendo un margen de beneficio.
El empresario afirma haber pasado después a revender ropa de tiendas de segunda en eBay (una afirmación sin duda incorrecta, pues eBay se fundó después de la época en la que él salió de la secundaria), antes de entrar a la Universidad de Nueva York. Estudió finanzas y negocios internacionales.
En 2000, Garg y su amigo de la secundaria, el también inmigrante Raza Khan, comenzaron con una compañía privada de préstamos para estudiantes llamada MyRichUncle. El sitio se destacaba de otros prestamistas usando algoritmos para determinar los términos de los préstamos para los estudiantes interesados.
Para 2007, Garg ya había abandonado la universidad y MyRichUncle cotizaba en la bolsa, volviéndose una de las compañías privadas de préstamos estudiantiles más grande de Estados Unidos. La empresa fue finalmente comprada por Merrill Lynch, y después por el Bank of America.
Dos años después llegó la crisis financiera, y MyRichUncle se vio obligado a declararse en bancarrota del Capítulo 7.
A pesar de este revés, el dúo vio una oportunidad y lanzó un nuevo proyecto llamado EIFC, que utilizaba la misma tecnología que MyRichUncle para determinar los términos de los préstamos y así permitir a los propietarios de viviendas identificar aquellos préstamos que los bancos nunca debieron haber aprobado. Esa información podía brindarles las herramientas necesarias para demandar a las instituciones que emitían esos préstamos predatorios.
En 2013, sin embargo, las cosas se pusieron feas entre ambos. Khan presentó una demanda alegando que Garg (que supervisaba las finanzas de la compañía) no había estado presentando los impuestos sobre el negocio, y que además había transferido US$3 millones de las arcas de la empresa a sus cuentas personales.
La relación entre los otrora amigos se volvió más ríspida: Garg afirmó que Khan había robado US$400.000 (algo que Khan ha negado), lo que resultó en una declaración durante la cual Garg amenazó a Khan con “engraparlo a una maldita pared y quemarlo vivo”.
Más tarde, Garg se disculpó por los comentarios, pero desde entonces ha llamado a Khan un “completo charlatán que solía ser mi mejor amigo”.
Un año después de la denuncia, Garg fundó Better.com, que brinda servicios digitales de hipoteca para posibles propietarios. La empresa ha sido largamente promocionada como una de las startups de tecnología financiera más populares de los últimos años, pero para 2019, las acusaciones de mal manejo financiero comenzaron a circular entre sus empleados.
Según The Daily Beast, los trabajadores de Better.com afirmaron que Garg ha estado entregando grandes cantidades de capital a una de sus principales lugartenientes, Elana Knoller, en forma de opciones sobre acciones y de un pago mensual de US$8.000 por dos casas, entre otras ventajas. Estos beneficios no son consistentes con los recibían otros altos directivos de la empresa.
“Es una locura”, dijo un ex empleado senior al medio. “Es como un donativo. El objetivo de las opciones es incentivar cuatro años de trabajo. Esto es como entregar efectivo”.
Knoller dejó la empresa cuatro meses después de que comenzaran a circular las acusaciones. La habían puesto en baja administrativa por presuntamente intimidar a los trabajadores, según Forbes.
Más recientemente, Garg ha enfrentado críticas por su trato hacia sus empleados. Forbes informó sobre un correo electrónico filtrado en el cual el director general llamaba a sus empleados “un montón de DELFINES TONTOS” que iban a ser tragados por tiburones, y decía que eran “DEMASIADO LENTOS”.
Tras el despido masivo, Garg, a través de un post anónimo en la red social Blind, acusó a su antiguo personal de ser “flojos e improductivos”.
“¿Sabían que al menos 250 de las personas despedidas trabajaban dos horas al día en promedio, aunque registraban más de ocho horas diarias en el sistema de nómina?”, escribió. “Estaban robándoles y robando a nuestros clientes que pagan las facturas que pagan nuestras facturas”.
Garg confirmó a Fortune que él es la persona que escribió este post, y agregó: “Creo que podrían haberlo redactado diferente, pero sinceramente, el sentimiento está allí”.
The Independent se ha puesto en contacto con Garg y Better.com para obtener comentarios.
A pesar de la mala prensa, la valoración implícita de Better.com antes de su llegada a los mercados era de US$6.900 millones.