Astroworld: Cuatro grandes preguntas sin respuesta sobre el trágico concierto de Travis Scott
A medida que autoridades y abogados comienzan a examinar las pruebas, surgen serias dudas sobre el papel que la estrella del rap Travis Scott y la organizadora Live Nation pudieron haber jugado en la catástrofe
Hay muchas cosas que todavía no sabemos sobre el desastre mortal de Astroworld, pero las preguntas más importantes están tomando forma.
Múltiples demandas e investigaciones ya se están llevando a acabo, y funcionarios de Houston están revisando el plan de seguridad del festival, verificando los permisos y analizando imágenes de CCTV.
Los investigadores deberán descubrir si la compañía organizadora, Live Nation, es de alguna manera la culpable de lo que sucedió, así como el papel que jugó el artista principal y fundador del festival Travis Scott.
El jefe de bomberos de Houston, Samuel Peña, dijo el sábado que la magnitud de la multitud y sus lesiones “sobrepasaron rápidamente” a las empresas privadas contratadas por Live Nation para administrar los servicios médicos y de seguridad.
También hay preguntas para la policía y los servicios de emergencia de Houston, luego de que el alcalde Sylvester Turner afirmara que el evento tuvo más seguridad que la final de béisbol de la Serie Mundial a principios de este mes.
Michele Arnold, portavoz de la Oficina de Medicina Forense del Condado de Harris, informó que podrían pasar “varias semanas” antes de que se declare la causa de muerte de las ocho personas que han fallecido hasta ahora.
Estos son los temas clave en juego.
1. ¿Por qué no se detuvo el concierto antes?
Hay muchos puntos en los que el set de Travis Scott en Astroworld podría haberse detenido antes de que terminara su última canción alrededor de las 10:10 pm.
Quizás podría haberse detenido a las 9:30 pm, cuando la enfermera de cuidados intensivos fuera de servicio Madeline Eskins se despertó en el área de admisiones después de desmayarse entre la multitud y vio a muchas otras personas que habían colapsado y recibían compresiones torácicas.
Tal vez podría haberse detenido a las 9:35 pm, hora en la que, según The Washington Post, dos asistentes al concierto, Seanna McCarty y Ayden Cruz, fueron captadas en video subiéndose a la plataforma de una cámara y rogando al operador que interviniera.
Podría haberse detenido a las 9:38 pm, cuando el Departamento de Bomberos de Houston declaró un “siniestro con víctimas en masa”, o a las 9:53 pm, cuando los videoclips vistos por KHOU-11 muestran a personas inconscientes en el suelo. Pero no se detuvo, y Live Nation tiene muchas preguntas que responder sobre el porqué.
El operador de cámara que discutió con Seanna McCarty parece haber tenido un walkie talkie en el cinturón y unos auriculares en las orejas; ¿podría haberlos utilizado para solucionar el problema? El personal que prestó ayuda a los invitados en el área de admisiones probablemente estaba en contacto con sus colegas; ¿podrían haber hecho comprender a sus superiores lo graves que eran las cosas?
El jefe de policía Troy Finner ha dicho que Astroworld fue clausurado tan pronto como se pudo. Dijo: “No se puede cerrar cuando se tienen 50.000 personas tan jóvenes. Podrían darse disturbios”.
Aun así, ¿habría ayudado si el Scott hubiera detenido su actuación, o hubiera hecho un anuncio, o si Live Nation hubiera cortado las luces y el sonido?
2. ¿Las medidas de control de multitudes estuvieron a la altura?
Lo que sucedió en Astroworld se conoce como un “estampida”, y es muy común: desde el desastre del estadio de fútbol de Hillsborough en 1989, que mató a 97 personas, hasta la catástrofe que mató a unos 2.400 peregrinos en La Meca en 2015.
Estos eventos tienden a causar muerte y lesiones no por pisoteo o aplastamiento literal hasta la muerte, sino por asfixia, ya que las personas en la multitud son presionadas desde todos los lados hasta el punto en que no pueden respirar.
El tamaño de la multitud y los efectos del aplastamiento dificultan comunicar que algo anda mal, por lo que partes de la multitud pueden seguir presionando en una dirección sin conocer el efecto que esto tiene.
Los expertos dicen que este es un riesgo probable cuando hay grandes multitudes a menos que se implementen medidas de mitigación específicas. La densidad de la aglomeración puede ser limitada, con medidas para forzar espacios o barreras para dividir a las personas en múltiples multitudes más pequeñas. Estas barreras también pueden garantizar el acceso y el movimiento del personal del evento.
G Keith Still, profesor de ciencia de multitudes en la Universidad de Suffolk, dijo a Associated Press que los organizadores de eventos necesitan sistemas sólidos de gestión de multitudes para detectar las señales de alerta con anticipación e informarlas a la cadena de mando.
Steve Allen, un consultor de multitudes del Reino Unido que ha detenido personalmente unos 25 shows, incluidos los de Oasis, Red Hot Chili Peppers y Eminem, señaló que los eventos deberían tener observadores de multitudes entrenados con audífonos con cancelación de ruido que permanezcan en comunicación directa con alguien que tenga el poder de detener el espectáculo.
Entonces: ¿Live Nation tenía tales sistemas en su lugar? Y si así era, ¿qué les pasó? Los videos de ese día más temprano que muestran cercas y puertas de seguridad derribadas por contingentes apresurándose a entrar no son un buen augurio para las respuestas.
3. ¿Cómo se relacionan los supuestos “ataques con drogas”?
En una conferencia de prensa el sábado, el jefe Finner hizo una sugerencia impactante: que un oficial de seguridad en el concierto pudo haber sido inyectado con drogas por una persona desconocida en el momento de la estampida.
“Una de las narrativas [que circulan] fue que un individuo estaba inyectando drogas a otras personas. Tenemos un informe de un oficial de seguridad, según el personal médico que lo atendió anoche, que se acercó para inmovilizar o agarrar a un ciudadano y sintió un pinchazo en el cuello”, informó.
Finner dijo que el oficial fue revivido con Narcan, un aerosol nasal que se usa para tratar presuntas sobredosis de opioides, y que el personal médico “notó la marca de un pinchazo que era similar al que se tendría si alguien intentara inyectarse”.
No se ha sabido nada más desde entonces, y no está claro si alguien más recibió el mismo “pinchazo”. ¿El informe del guardia de seguridad ayuda a explicar la causa de la estampida, o es simplemente una pista falsa?
Tenemos que tener cuidado aquí, porque dado lo que sabemos sobre los desastres de multitudes, no es necesario ningún ataque con drogas o narcóticos para explicar cómo ocurren. Aun así, muchas personas en las redes sociales se han apropiado de la idea de que alguien estaba inyectando a los asistentes al concierto, algo de lo que todavía hay poca evidencia.
4. ¿Estaba preparado el personal para emergencias médicas?
Una de las afirmaciones más inquietantes de la enfermera Madeline Eskins es que el personal médico de Astroworld no estaba debidamente capacitado o equipado para tratar con las víctimas.
Según Associated Press, el contratista de seguridad de Live Nation, Contemporary Services Corp, con sede en Los Ángeles, presentó un plan de operaciones de 56 páginas con el condado de Harris que mencionaba “el potencial de múltiples incidentes relacionados con el alcohol y las drogas, las posibles necesidades de evacuación y el siempre presente amenaza de una situación con víctimas en masa”.
El plan dice que el personal debe notificar a “Control de eventos” cuando se crea que alguien ha muerto usando la palabra clave “smurf” y “nunca usar el término ‘muerto'’ o ‘fallecido’ en la radio”.
Pero en una publicación de Facebook hecha después del evento, Eskins escribió: “Le pregunto dónde está la bolsa AMBU [un aparato respiratorio médico], dónde está el [desfibrilador], dónde está la camilla y la ambulancia, dónde carajos está cualquier m****a, y dijeron basicamente que no había nada.
“Hay una bolsa AMBU, una camilla y un [desfibrilador] para tres, ahora cuatro, personas que no tienen pulso y están azules. La gente en la multitud está tratando de ayudar. Los adolescentes están haciendo resucitación cardiopulmonar, pero lo hacen de forma incorrecta.
“Luego veo que hay otras personas que realizan RCP en personas que todavía tienen pulso, porque nadie ha hecho un control del pulso. Fue un desastre absoluto”.
En otra publicación en Instagram, Eskins afirmó que parte del personal médico no tenía experiencia con compresiones torácicas y “no sabía cómo controlar el pulso, la [arteria] carótida o la [arteria] femoral”.
Todo esto genera grandes interrogantes para Live Nation, Contemporary Services y cualquier otra empresa involucrada.