Coronavirus: Sudáfrica anuncia el cierre de las playas durante las festividades
El presidente anunció otras restricciones como un toque de queda nocturno y la regulación en la venta del alcohol
El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, anunció el cierre de muchas de las playas del país durante la temporada navideña para combatir el resurgimiento de nuevas infecciones por COVID-19.
Todas las playas permanecerán cerradas desde el 16 de diciembre hasta enero en la provincia de Eastern Cape y la zona turística Garden Route en la provincia de Western Cape. En la provincia de Kwazulu-Natal, las playas permanecerán cerradas los días festivos, incluidos Navidad y Año Nuevo.
Ramaphosa dijo que existe la preocupación de que las nuevas infecciones en la segunda ola del virus que vive el país estén aumentando rápidamente y puedan abrumar a algunos hospitales.
“Si no hacemos las cosas de manera diferente en esta temporada de festividades, recibiremos el Año Nuevo no con alegría, sino con tristeza”, dijo Ramaphosa en un discurso televisado a la nación el lunes por la noche. “Muchos de nuestros amigos, parientes y compañeros de trabajado se infectarán, algunos enfermarán gravemente y otros, trágicamente, morirán”.
Las nuevas infecciones se han atribuido al hecho de que las personas no usan máscaras y practican el distanciamiento social, mientras que las grandes reuniones, especialmente las fiestas, se han identificado como eventos de gran difusión.
Ramaphosa también anunció un toque de queda nocturno extendido y mayores restricciones en la venta de alcohol, que ahora solo se venderá de lunes a jueves entre las 10 am y las 6 pm. Además, extendió el toque de queda nocturno desde las 11 pm hasta las 4 am y los restaurantes y bares deben cerrar a las 10 pm
Sudáfrica ha registrado 7,999 nuevas infecciones y 170 muertes en las últimas 24 horas, lo que eleva el número acumulado de casos confirmados desde el brote del virus a 860,964.
La próxima temporada navideña presenta un riesgo de más infecciones, ya que muchas personas viajan a través de las provincias para pasar las vacaciones y visitar a sus familias, dijo Ramaphosa.
Dijo que su gobierno quiere contener el virus sin imponer restricciones que puedan dañar la economía.
Más de 2 millones de personas perdieron sus trabajos durante el confinamiento anterior en el país en abril y mayo, según la autoridad de estadísticas del país, StatsSA.
Según Ramaphosa, el país espera recibir su primera entrega de una vacuna COVID-19, que debería cubrir el 10% de los 60 millones de habitantes del país, a principios de 2021.
En la vecina Esuatini, el primer ministro Ambrose Dlamini, que dio positivo por COVID-19, murió, así lo anunció el gobierno del reino.
Dlamini, de 52 años, que había sido primer ministro desde 2018, anunció en noviembre que había dado positivo por el virus y estaba siendo tratado en un hospital de la vecina Sudáfrica.
El gobierno de Esuatini, el país anteriormente conocido como Suazilandia, anunció la muerte de Dlamini en Twitter.
Esuatini, un pequeño reino montañoso al noreste de Sudáfrica, ha registrado casi 7.000 casos confirmados de COVID-19 y 127 muertes.