Hutíes de Yemen atacan dos buques portacontenedores en el mar Rojo
Un misil balístico disparado por combatientes hutíes de Yemen hizo blanco en un carguero el viernes en el mar Rojo, cerca del estrecho de Bab el-Mandeb, luego de otro ataque perpetrado horas antes contra otro buque, informaron autoridades.
Los ataques contra el MSC Palatium III y previamente contra el Al Jasrah recrudecen la campaña marítima de los hutíes, quienes son respaldados por Irán. Los ataques también ponen en peligro a los buques que viajan a través de un corredor vital para los embarques de mercancías y energéticos con destino a Europa y Asia, desde el Canal de Suez hasta el océano Índico.
Los hutíes afirman que sus ataques pretenden presionar para poner fin a la ofensiva militar israelí contra la Franja de Gaza, donde Israel libra una guerra contra Hamás. Sin embargo, los vínculos con los buques atacados por los rebeldes son cada vez más tenues.
“Las fuerzas armadas yemeníes confirman que seguirán impidiendo que todos los barcos que se dirijan a puertos israelíes naveguen en el (mar Rojo) hasta que traigan los alimentos y medicinas que necesitan nuestros hermanos de la Franja de Gaza”, declaró el portavoz militar hutí, general de brigada Yahya Saree, en un comunicado en el que reivindicaba la autoría de los ataques del viernes.
Los recientes ataques hicieron que Maersk, la compañía naviera más grande del mundo, anunciara el viernes que ha comunicado a todos sus buques que tenían previsto pasar por el estrecho de Bab el-Mandeb que “suspendan su viaje hasta nuevo aviso.” La naviera Hapag-Lloyd, con sede en Alemania, que operaba el Al Jasrah, también dijo que pausaría todo su tráfico de buques portacontenedores a través del mar Rojo hasta el lunes.
Mientras tanto, secuestradores presumiblemente somalíes se apoderaron por separado de un buque búlgaro en el mar Arábigo.
Un funcionario de defensa de Estados Unidos y la empresa privada de inteligencia Ambrey dijeron que el MSC Palatium III, un portacontenedores de bandera liberiana, se incendió tras el ataque. No estaba claro por el momento si alguien a bordo del buque había resultado herido.
En el ataque se dispararon dos misiles, que probablemente intentaban alcanzar al Al Jasrah, según el funcionario estadounidense. Uno de ellos se desvió y cayó al agua, mientras que el otro se estrelló contra el Palatium.
El Palatium dio media vuelta tras el ataque y ahora intentaba dirigirse hacia el sur, según datos de seguimiento analizados por The Associated Press.
El MSC Alanya, otro buque de MSC, o Mediterranean Shipping Co., con sede en Suiza, ya había sido advertido por los hutíes en torno a Bab el-Mandeb, dijo Ambrey. “La empresa matriz había cooperado con Israel, y es probable que esta fuera la razón por la que fue amenazada”.
El funcionario habló bajo condición de anonimato para discutir asuntos de inteligencia. MSC no respondió por el momento una solicitud de comentarios.
En el anterior ataque contra Al Jasrah, seguía sin estar claro si fue un misil o un dron el que alcanzó el buque, dijo el funcionario. Ambrey y la agencia de Operaciones de Comercio Marítimo del ejército británico, que vigila las rutas marítimas de Oriente Medio, también confirmaron ese ataque.
“Al parecer, el proyectil impactó en el costado de babor del buque y un contenedor cayó por la borda debido al impacto”, dijo Ambrey. “El proyectil provocó un incendio en cubierta".
La naviera Hapag-Lloyd dijo que ningún miembro de la tripulación había resultado herido en el ataque. Más tarde anunció que también suspendería la navegación de sus buques por el mar Rojo hasta el lunes y tomará una decisión “para el periodo posterior”.
Ambrey señaló que Hapag-Lloyd “tiene oficinas en los puertos israelíes de Ashdod, Haifa y Tel Aviv”.
En su declaración, el portavoz militar Saree afirmó que los hutíes tenían como objetivo el Palatium III y el Alanya, no el Al Jasrah. No quedó claro por qué identificó erróneamente al segundo barco.
Los ataques del viernes intensifican aún más la campaña de los combatientes Houthi, que en los últimos días han reivindicado la autoría de una serie de ataques con misiles que no alcanzaron navíos en el mar Rojo y su estratégico estrecho de Bab el-Mandeb.
El jueves, los hutíes dispararon un misil balístico que no llegó a alcanzar a otro portacontenedores que navegaba por el estrecho.
El día anterior, dos misiles disparados desde territorio controlado por los hutíes no alcanzaron un buque cisterna comercial cargado de combustible para aviones producido en la India cerca del estrecho de Bab el-Mandeb. También cerca del estrecho, un misil disparado por los hutíes el lunes por la noche se estrelló contra un petrolero de bandera noruega en el mar Rojo.
El transporte marítimo global se ha visto cada vez más asediado a medida que la guerra entre Hamás e Israel amenaza con convertirse en un conflicto regional más amplio.
El estrecho de Bab el-Mandeb tiene apenas 29 kilómetros (18 millas) de ancho en su punto más estrecho, lo que limita el tráfico a dos canales en sentidos opuestos, según la Administración de Información de Energía de Estados Unidos. Casi el 10% del petróleo que se transporta por mar pasa por ahí, y se estima que las mercancías que lo atraviesan en un año tiene un valor total de un billón de dólares.