El papa condena el antisemitismo, el terrorismo y la guerra en una reunión con rabinos europeos
El papa Francisco se reunió el lunes con rabinos europeos y condenó el antisemitismo, la guerra y el terrorismo en un discurso escrito que prefirió no leer, indicando que no se sentía bien.
Durante la audiencia en el Palacio Apostólico del Vaticano, Francisco dijo a los rabinos que se alegraba mucho de recibirles, aunque añadió que no se encontraba bien y por lo tanto prefería no leer el discurso sino entregárselo, para que pudieran llevárselo con ellos.
El papa “tiene un poco de resfriado y un largo día de audiencias”, dijo el vocero del Vaticano Matteo Bruni. El pontífice de 86 años, señaló, “prefirió dirigirse de forma individual a los rabinos europeos, y por eso entregó su discurso”.
El papa continuaría con sus actividades previstas el resto del día, añadió. Hacia el final de la tarde había programado un encuentro con niños de todo el mundo.
En su discurso preparado a los rabinos, Francisco dijo que su primer pensamiento y sus oraciones iban “por encima de todo, a todo lo que ha ocurrido en las últimas semanas”, una clara referencia a la guerra entre Israel y Hamás, que comenzó con un ataque de Hamás del 7 de octubre en Israel, que incluyó llevar rehenes a la Franja de Gaza.
“Una vez más, la violencia y la guerra se han recrudecido en esa tierra que, bendecida por el Altísimo, parece oponer continuamente la bajeza del odio y el ruido mortífero de las armas”, escribió Francisco en el discurso.
Varios países europeos, como Francia, Austria e Italia, han sufrido recientemente episodios de vandalismo y lemas antisemitas, y Francisco añadió que “es preocupante la difusión de manifestaciones antisemitas, que condeno con firmeza”.
El papa ha sufrido varios problemas de salud en los últimos años, como dos cirugías abdominales y un problema crónico en la rodilla que le obliga a utilizar una silla de ruedas cuando recorre distancias largas. Este año fue hospitalizado para ser atendido por lo que el Vaticano describió como una bronquitis, pero el papa describió como un brote de neumonía.
Hace apenas unos días, cuando se le preguntó por su salud en la televisora estatal italiana, Francisco respondió con una de sus frases habituales, “sigo vivo, ¿saben?” y también comentó que viajaría a Dubái a principios de diciembre para la conferencia climática de Naciones Unidas COP28.