Carlos “El Chacal” pierde apelación contra cadena perpetua por atentado de 1974 en París
El venezolano cumple una sentencia por un ataque con granadas perpetrado en 1974 en los Campos Elíseos
El militante de izquierda Carlos “El Chacal”, que llevó a cabo ataques terroristas en todo el mundo, ha visto rechazada su apelación para reducir una de sus cadenas perpetuas.
Carlos, nacido como Ilich Ramírez Sánchez, está cumpliendo tres cadenas perpetuas, la tercera que se aprobó en 2017 por un ataque con granadas en 1974 en los Campos Elíseos de París, Francia, que mató a dos personas e hirió a 36.
Ha estado en prisión en Francia desde que fue capturado en Sudán por las fuerzas especiales francesas en 1994.
El hombre de 71 años compareció ante el tribunal con la esperanza de reducir su pena de cárcel, pero en cambio se confirmó su tercera cadena perpetua, informó la Fiscalía de París.
Carlos siempre ha eludido cualquier responsabilidad por el ataque en la Drugstore Publicis, pero fue vinculado a él por un ex asociado, a pesar de la falta de pruebas de ADN o huellas dactilares.
Su primera cadena perpetua fue por el asesinato en 1975 de dos policías franceses y un informante, mientras que la segunda fue por ataques en 1982 y 1983 que mataron a 11 personas e hirieron a más de 150.
Ya ha perdido apelaciones contra ambas sentencias.
Carlos, un "revolucionario profesional", según admitió él mismo, nació en el seno de una familia adinerada en Caracas.
Durante las décadas de 1970 y 1980 se convirtió en uno de los hombres más buscados del mundo, especialmente después de participar en un ataque de la organización petrolera de la OPEP, en su sede en Viena, Suiza, en el que murieron tres personas.
El incidente siguió tras una serie de asaltos a objetivos occidentales, incluido un intento fallido de asesinato del vicepresidente de la Federación Sionista Británica en 1973.
También estuvo involucrado en un atentado fallido en el Bank Hapoalim, de Londres, y en el estallido de un coche bomba en tres periódicos franceses.
Le pusieron el sobrenombre de “El Chacal” después de que un periodista supuestamente vio en su casa la novela de 1971 de Frederick Forsyth, El día del chacal.