Exmodelos de Victoria’s Secret critican campaña para atraer a “adolescentes y preadolescentes”
“No se trataba tanto de la ropa como de que las modelos cumplieran esta idea de esta fantasía que Victoria’s Secret quería cumplir”
Las exmodelos de Victoria’s Secret hablan sobre las problemáticas formas en que la marca de lencería supuestamente se dirigía a “adolescentes y preadolescentes” en un nuevo documental publicado esta semana.
Las cuestionables tácticas de marketing de la compañía se plantean en la nueva docuserie de Hulu, de tres partes, Victoria’s Secret: Angels and Demons, que refleja con franqueza la introducción de la línea Pink de la marca.
En 2002, Victoria’s Secret introdujo Pink, que fue creada para dirigirse a un público más joven de niñas y adolescentes. Sin embargo, el nuevo documental revela que los empleados y las modelos estaban preocupados por el giro, y las antiguas ángeles recuerdan su malestar por llevar lencería adornada con juguetes y globos en las pasarelas del infame Victoria’s Secret Fashion Show.
“Tenía este vestido con cosas de juguete por [todos] lados y todo el conjunto se basaba más o menos en juguetes”, explicó la exmodelo de Victoria’s Secret, Dorothea Barth Jörgensen, sobre el atuendo que lució durante la pasarela de 2012.
Jörgensen comentó que el marketing de la empresa dirigido a preadolescentes y adolescentes fue aún más eficaz ese año porque las modelos llevaban los conjuntos mientras Justin Bieber, que tenía 18 años en ese momento, actuaba durante la pasarela anual.
“Los hijos de mi hermana estaban muy emocionados porque iba a desfilar con Justin Bieber. Estaban tan obsesionados con él y tenían como 10 y 12 años en ese momento, así que creo que definitivamente dieron en el blanco”, recordó Jörgensen.
La exmodelo de Victoria’s, Secret Lyndsey Scott, también reflexionó sobre la forma en que la empresa se dirigía a las generaciones más jóvenes con ropa y accesorios de aspecto infantil. Scott recordó el desfile de 2009 en el que desfiló por la pasarela “llevando globos”.
“Llevaba globos. No era ropa, no se vendía en las tiendas”, señaló. “No se trataba tanto de la ropa como de que las modelos cumplieran esa idea de fantasía que Victoria’s Secret quería cumplir”.
Mientras que el exdirector de marketing de Victoria’s Secret, Ed Razek, supuestamente utilizaba la palabra “fantasía” para comercializar la lencería para adultos de la marca, el documental revela que la palabra utilizada para Pink era “FOMO [miedo a perderse algo]”.
“Querían crear FOMO, querían que la gente tuviera miedo a perderse algo”, explicó la exempleada de Pink, Lindsey Cosella. “Esa fue la estrategia de marketing, y funcionó”.
Según Cosella, la marca no le gustó porque intentaba que las jóvenes se sintieran mal consigo mismas.
“Ya tenías esta marca que tenía unos estándares inalcanzables para la mujer común y corriente, y ahora intentabas hacer cosas que hicieran que las chicas se sintieran peor consigo mismas”, expresó.
El director del documental, Matt Tyrnauer, señaló que la introducción de la línea Pink de Victoria’s Secret y la comercialización de la marca casi de la misma manera que la empresa de lencería comercializaba su ropa interior para las mujeres adultas “parece tan equivocada” en retrospectiva, pero “siguió su camino”.
La docuserie también aborda las formas en que el marketing impreso de Victoria’s Secret jugaba con las inseguridades de las jóvenes y adolescentes, y de las mujeres, con exempleados que reconocen los retoques que se hacían en las campañas de la marca.
“Una de las cosas que más me sorprendió cuando trabajé entre bastidores fue que no me di cuenta de la cantidad de retoques que se hacían”, indicó Casey Crowe Taylor, exempleada de Victoria’s Secret. “Es una imagen retocada, con Photoshop, cambiada. Es literalmente imposible”.
La preocupación asociada a la línea Pink de Victoria’s Secret y el hecho de que la marca se dirigiera a chicas jóvenes es solo uno de los temas que se plantean en la docuserie, que comenzó a emitirse en Hulu el 14 de julio, ya que la serie también profundiza en la cultura misógina de la marca bajo el mandato de Razek, y en la relación entre el antiguo propietario de Victoria’s Secret, Leslie Wexner, y el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein.
The Independent se puso en contacto con Victoria’s Secret para pedirle comentarios.