Más de 200 mujeres y reclusas transgénero serán transferidas de Rikers Island a custodia estatal

La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, y el alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, aprobaron el traslado de casi todas las mujeres y los reclusos transgénero en el complejo carcelario de la ciudad en Rikers Island, lo que eleva el número total de personas que se trasladaron de las instalaciones a custodia estatal a más de 350.

La gobernadora y el alcalde anunciaron el 13 de octubre que aproximadamente 230 mujeres y personas transgénero se trasladarán de la prisión de la ciudad a las cárceles estatales en el condado de Westchester, debido al deterioro de las condiciones en las instalaciones.

"La situación en Rikers Island es grave y compleja, y por lo tanto requiere una acción audaz de todos los niveles de gobierno para lograr el cambio", dijo la gobernadora Kathy Hochul en un comunicado. La próxima semana se comenzará a trasladar, dos veces por semana, de 10 a 20 personas.

El traslado temporal "ayudará a aliviar las preocupaciones sobre el personal, las limitaciones de capacidad y mejorará la seguridad de cientos de detenidos hasta que la ciudad pueda identificar e implementar una solución permanente que haga justicia a la situación en Rikers", dijo.

Una declaración conjunta de varios miembros de la delegación del Congreso de Nueva York, incluidos los representantes de los Estados Unidos Alexandria Ocasio-Cortez y Carolyn Maloney, condenó las condiciones en la cárcel de la ciudad como una "crisis humanitaria" y exigió a los funcionarios que tomen medidas inmediatas para aliviar el hacinamiento en la cárcel, como liberar a los reclusos acusados de delitos no violentos mientras esperan el juicio.

“Podemos actuar hoy iniciando el proceso de ‘excarcelación’, apoyando el regreso de las personas a sus comunidades y trabajando con los tribunales para reducir las sentencias previas al juicio y acelerar las audiencias de los encarcelados actualmente”, escribieron los legisladores.

Los legisladores demócratas también pidieron el cierre acelerado de la cárcel para 2027.

"La horrible historia de Rikers debe llegar a su fin", dijeron.

Al menos 11 personas detenidas en la cárcel han muerto desde diciembre. Al menos cinco presos se han suicidado en 2021.

Los defensores de la reforma carcelaria advierten que los reclusos se enfrentan a una falta de atención médica y psiquiátrica, así como a guardias ineficaces y con poco personal que no han logrado mantener a las personas a salvo. Los reclusos en la cárcel también han soportado largas detenciones previas al juicio, mientras que los tribunales están sumidos en las demoras de la pandemia Covid-19, que ha agravado décadas de negligencia, mala gestión y problemas con el personal.

Una delegación del Congreso de Nueva York que incluía a los representantes estadounidenses Ocasio-Cortez, Maloney y Ritchie Torres visitó las instalaciones el 12 de octubre para ver las condiciones y hablar con los reclusos y la gerencia.

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El mes pasado, Torres encabezó una carta de la delegación demócrata de la Cámara de Representantes del estado a Joe Biden y al Departamento de Justicia de Estados Unidos solicitando la intervención federal y una investigación de derechos civiles.