EEUU: Contratista militar, primer beneficiado de programa para desarrollo de chips
El gobierno estadounidense anunció el lunes que otorgará 35 millones de dólares a BAE Systems para incrementar la producción en una fábrica de Nueva Hampshire que elabora chips de computadoras para aeronaves militares como los jets F-15 y F-35.
Es la primera asignación de recursos derivada de la ley sobre CHIPS y Actividades Científicas, que provee más de 52.000 millones de dólares para fomentar el desarrollo y la manufactura de semiconductores en Estados Unidos.
La decisión del Departamento de Comercio de otorgarle los recursos a un contratista militar en vez de a un fabricante convencional de chips revela el enfoque de la ley hacia la seguridad nacional, en momentos en que más y más sistemas bélicos dependen de chips avanzados que podrían ser decisivos en el combate y la prevención de guerras.
El presidente Joe Biden firmó la ley en agosto de 2022 en parte debido a temores de que un ataque militar contra Taiwán prive al mundo de chips avanzados y hunda a Estados Unidos en una recesión.
“No podemos arriesgar nuestra seguridad nacional dependiendo de una sola región del mundo o incluso de un solo país para las tecnologías avanzadas necesarias”, declaró la secretaria de Comercio Gina Raimondo, quien calificó las inversiones de “una oportunidad que llega una vez por generación, para impulsar nuestra seguridad nacional y económica y crear una industria de manufactura de semiconductores pujante y duradera”.
La pandemia del coronavirus reveló la fragilidad de las cadenas de suministro de chips para computadoras, cuando una escasez global afectó la producción automotriz en Estados Unidos y disparó los precios.
En un comunicado, Biden dijo que los incentivos ya han derivado en más de 230.000 millones de dólares en inversiones planeadas en semiconductores y dispositivos electrónicos.
Biden ha ido al lugar de una futura fábrica de Intel en Ohio y a una fábrica de Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. en Arizona, y ha promovido las inversiones de IBM en Nueva York. Es parte de su discurso de cara a las elecciones de 2024, en que afirma que sus políticas han estimulado a la economía estadounidense.