Yucatán aprueba el matrimonio igualitario y es el tercer estado en hacerlo este año en México
Yucatán se convirtió en el estado número 22 en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en el país
Con una mayoría abrumadora, el estado de Yucatán se convirtió en la más reciente entidad en México en aprobar el matrimonio igualitario en el Congreso. Con 20 votos a favor, por cinco en contra, se dio el visto bueno para reformar la constitución estatal y se acató una orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
El hito se consiguió gracias a los votos de 10 diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuatro de Morena, dos de Movimiento Ciudadano, dos del Partido Acción Nacional (PAN), uno del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y uno del Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Los cinco sufragios en contra de esta ley provinieron de otros legisladores del PRI y PAN.
El Congreso de Yucatán modificó el artículo 94 de la constitución estatal para eliminar la concepción anterior del matrimonio en el estado. Esta figura legal ahora es definida como “la unión jurídica libre y voluntaria de dos personas con igualdad de derechos, deberes y obligaciones”.
La votación sobre el matrimonio igualitario se realizó después de que la SCJN ordenó a los diputados locales votar una vez más esta reforma constitucional, después de que celebraron una sesión secreta en 2019 para rechazar la unión civil entre parejas del mismo sexo.
Con la aprobación del matrimonio igualitario en Yucatán, ahora son 22 estados de México en los que personas del mismo sexo pueden formalizar ante la ley su relación. Sin embargo, algunos de ellos aún no hacen una reforma para plasmarlo en su constitución, por lo que las parejas solo pueden casarse si emprenden una acción de inconstitucionalidad.
Asimismo, Yucatán se une a Baja California y Sinaloa como los más recientes estados en legalizar el matrimonio igualitario en sus respectivos Congresos durante 2021.
Además de legalizar los matrimonios igualitarios, los legisladores yucatecos aprobaron por unanimidad penalizar a las personas que realicen terapias de conversión de orientación sexual en la entidad.
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Este tipo de acciones serán castigadas con hasta tres años de prisión y las penas podrían ser duplicadas en caso de que familiares, profesionales de la salud, maestros o miembros de cultos incurran en ellas cuando se trate de un menor de edad.