Cárteles de la droga en la Ciudad de México expanden su negocio al despojo
La Unión Tepito y el Cártel de Tláhuac –dos de las organizaciones criminales más pujantes de la capital mexicana– han diversificado su gama de delitos debido a que estos dejan cuantiosas ganancias y les permiten blanquear millones de pesos en efectivo al año
Los cárteles de la droga en México no solo cometen el delito de distribución de estupefacientes, también comprenden otras faltas a la ley como la importación, transporte, almacenamiento y venta ilegal de enervantes. Y más allá de esta gama de delitos del fuero federal, en su clasificación de “delitos contra la salud”, las organizaciones delictivas en el país han diversificado su gama criminal.
Dos de las organizaciones que han aplicado este ‘modus operandi’ son la Unión Tepito y el Cártel de Tláhuac –dos de las agrupaciones delictivas más pujantes de la capital mexicana– que, en años recientes, se han caracterizado por el comercio de drogas, pero también por el secuestro, la extorsión e, inclusive, el cobro de cuotas a comercios fijos y ambulantes.
De acuerdo con reportes de la FGJ (Fiscalía General de Justicia) de la Ciudad de México, tanto la Unión Tepito como el Cártel de Tláhuac han utilizado sus ganancias de la venta de droga y otros delitos para incursionar en el despojo de predios, con el objetivo de blanquear millones de pesos en efectivo al año.
La FGJ refiere que ambas organizaciones han cometido despojos a predios, departamentos, terrenos baldíos e, incluso, reservas naturales en las alcaldías Tlalpan, Xochimilco, Milpa Alta, Magdalena Contreras y Cuajimalpa, según recoge el diario El Universal. El rotativo también agregó que los cárteles de la droga hicieron uso ajeno de áreas destinadas a complejos inmobiliarios de gran plusvalía en Cuauhtémoc, Benito Juárez y Miguel Hidalgo.
Una prueba de la invasión de los cárteles de la droga quedó documentada en febrero pasado, cuando la SSC (Secretaría de Seguridad Ciudadana) y la FGJ recuperaron y resguardaron 32 casas de la Unidad Habitacional Fuerte de Loreto, en Iztapalapa. Las viviendas habían sido invadidas entre los años 2017 y 2021, y aunque los dueños habían interpuesto denuncias por despojo, fue hasta hace poco que las autoridades pudieron ejecutar acciones legales.
Sin embargo, no muchos ciudadanos han vivido para contarlo. En 2021, cuatro personas fueron asesinadas tras resistirse a ceder sus predios. De acuerdo con las autoridades, el Cártel de Tláhuac hizo uso de la violencia y se apoderó de al menos 10 hectáreas en la colonia La Ciénega.
Las autoridades capitalinas han reiterado su compromiso de imponer castigos más severos contra aquellos que despojen a ciudadanos o familias enteras de sus propiedades, predios, casas o terrenos. Por su parte, el Código Penal de la Ciudad de México, en sus Artículos 237 y 238, únicamente establecen una pena de uno a seis años de prisión, “cuando el despojo se realice por grupo o grupos, que en conjunto sean mayores de cinco personas” y hasta una multa de 50 a 500 días de multa.
En tanto, el Código Penal Federal en su Artículo 395, establece que “al que de propia autoridad y haciendo violencia o furtivamente, o empleando amenaza o engaño, ocupe un inmueble ajeno o haga uso de él, o de un derecho real que no le pertenezca”, recibirá una pena de un año a seis años de prisión y una multa de 1.000 a 10.000 pesos, lo equivalente a 48 o 488 dólares.
Algunos analistas han sugerido que, las penas y multas por este delito, son menores si se considera que los cárteles de la droga ganan cantidades superiores a esos montos por toda la gama de delitos que cometen en la capital del país y en otros territorios aledaños.