AMLO: Castillo es presidente "legal y legítimo" de Perú
El presidente de México dice que el presidente depuesto de Perú, Pedro Castillo, sigue siendo “el presidente legal y legítimo” y fue encarcelado como resultado de un “golpe”
El presidente de México dijo el miércoles que el presidente depuesto de Perú, Pedro Castillo, sigue siendo “el presidente legal y legítimo” y fue encarcelado como resultado de un “golpe”.
El presidente Andrés Manuel López Obrador también calificó al actual gobierno peruano de “racista” y aseveró que encarceló a Castillo “porque es serrano, es indígena”. Es la declaración más enérgica hasta el momento de que López Obrador no reconoce a la actual presidenta peruana Dina Boluarte.
“Sostengo que (Castillo) es el presidente legal y legítimo”, dijo López Obrador en su conferencia de prensa matutina. “No aceptan a Pedro Castillo porque es serrano, es indígena”, dijo el presidente mexicano.
Boluarte tomó el poder el 7 de diciembre después que el Congreso destituyó y encarceló a Castillo, luego que éste intentó disolver a la legislatura para evitar una votación que lo hubiera destituido. Castillo, el primer gobernante peruano de origen rural andino, estuvo acosado por escándalos de corrupción y constantes renuncias al gabinete.
El gobierno de López Obrador no ha dicho que retirará el reconocimiento formal al gobierno de Boluarte. Pero las relaciones bilaterales se han deteriorado debido a su posición.
En febrero, Boluarte retiró a su embajador en respuesta a declaraciones de López Obrador.
La posición formal de México es que no “reconoce” ni deja de reconocer los gobiernos de otros países, pero no ha explicado cómo cuadra con las declaraciones del presidente.
Las protestas en Perú contra la destitución de Castillo comenzaron en diciembre y la policía ha respondido con violencia que ha causado 67 muertes, principalmente de manifestantes, según el defensor del pueblo.
López Obrador ha criticado la matanza de manifestantes en Perú, pero se lo ha criticado por su decir poco sobre los cientos de nicaragüenses muertos o exiliados por el gobierno del presidente Daniel Ortega.