23 actuaciones secretamente brillantes en películas horribles, desde Margot Robbie hasta Leonardo DiCaprio
Louis Chilton elige un puñado de grandes papeles que merecían algo mejor que las películas en las que aparecieron
Es justo decir que no hay nada más importante para las películas que los actores y actrices.
La interpretación correcta puede llevar una película al reino de la grandeza; una mala puede condenar a la mediocridad o al ridículo un proyecto que de otro modo sería prometedor.
¿Qué sería de There Will Be Blood sin Daniel Day-Lewis en el centro? ¿The Godfather aún brillaría sin Al Pacino y Marlon Brando?
A nadie le gustaría realmente averiguar el resultado de estas preguntas hipotéticas. Las mejores actuaciones son insustituibles; son la clave de la esencia misma del cine.
Pero, ¿qué sucede cuando una buena actuación no es suficiente para salvar una película? ¿O cuando se desperdicia una actuación excelente en una historia deficiente?
Desde Anthony Hopkins hasta Leonardo DiCaprio, muchos de los mejores actores que trabajan hoy han prestado su talento a proyectos inferiores. A veces solo cumplen por obligación, pero otras logran brillar a pesar del material.
Aquí está la lista de 23 actuaciones secretamente brillantes en malas películas preparada por The Independent...
Phillip Seymour Hoffman - Along Came Polly (2004)
El difunto y gran Phillip Seymour Hoffman fue de lo más raro: un actor que aportó profundidad incluso a los papeles más endebles, desde Plutarch Heavensby de The Hunger Games hasta el villano Owen Davian de Mission: Impossible III. Sin embargo, la comedia romántica destrozada por la crítica, Along Came Polly, puede ser el mejor ejemplo de esto, ya que Hoffman ofrece un papel cómico que se robó no solo una escena, sino toda la película a pesar de tener al lado a Ben Stiller y Jennifer Aniston.
Margot Robbie - Suicide Squad (2016)
Uno de los peores éxitos de taquilla que se recuerden, el canto fúnebre de supervillanos de David Ayer, Suicide Squad, recibió la condena unánime de la comunidad crítica. Sin embargo, las críticas también fueron unánimes en su elogio por la actuación de Margot Robbie, y la estrella australiana más tarde retomó el papel en dos películas posteriores.
Tom Hanks - The Ladykillers (2004)
The Ladykillers se considera legítimamente el punto más bajo de la filmografía de los hermanos Coen, por lo demás bastante consistente. Pero eso no se debe en absoluto a Tom Hanks, quien reinventó de manera convincente un papel interpretado de forma brillante por Alec Guinness en el clásico original de Ealing. Untuoso, erudito y muy siniestro, el líder de la banda criminal está muy lejos de cualquier otro personaje que Hanks haya abordado; devora el diálogo típicamente sarcástico de los Coen con una sonrisa.
James McAvoy - Split (2016)
El pomposo filme Split, con múltiples personalidades, de M Night Shyamalan tuvo muchos problemas, pero la actuación espectacular de James McAvoy no fue uno de ellos. Interpretar, en esencia, ocho personajes en uno es una tarea difícil de lograr, pero McAvoy lo maneja con aplomo teatral.
Kristen Stewart - American Ultra (2015)
Aunque Kristen Stewart ha aparecido en algunas de las mejores películas de los últimos 10 años, también tiene una buena cantidad de fallas. El thriller sobre adictos de 2015, American Ultra, fue un fracaso indiscutible. Ahí interpretó a la novia y manejadora de un agente durmiente del gobierno que sufre de amnesia, interpretado por Jesse Eisenberg. Es una mala película que nunca está a la altura de su exuberante premisa, pero Stewart realiza un trabajo muy bueno aquí.
Peter Dinklage - Pixels (2015)
No hay casi nada bueno que decir sobre esta insípida comedia de videojuegos de Adam Sandler de 2015. Pero lo poco que hay concierne solo a Peter Dinklage deGame of Thrones, quien ofrece una actuación incongruentemente divertida como el detestable campeón de videojuegos Eddie "The Fireblaster" Plant.
Thomas Hayden Church - Spider-Man 3 (2007)
Probablemente la peor película de Spider-Man que haya estado en cartelera, el remate de la trilogía de Sam Raimi fue un tórrido lío de tramas, demasiados villanos y malos cortes de pelo. El único pathos sincero de la película proviene de Thomas Hayden Church, quien de alguna manera logra sobrevivir a la carnicería con la cabeza en alto, al interpretar al personaje con destino trágico, Flint Marko, también conocido como Sandman.
John C Reilly - Kong: Skull Island (2017)
En teoría, Kong: Skull Island debería haber sido una maravilla. Tenía un elenco sólido (que incluía a Brie Larson, Tom Hiddleston, Samuel L Jackson y John Goodman), una premisa intrigante (King Kong durante la Guerra de Vietnam) y el simio de 104 pies (32 metros) que todos conocemos y amamos. Pero la película fue una gran decepción. La única gracia salvadora fue John C Reilly, cuya breve aparición como piloto de la Segunda Guerra Mundial varado en Skull Island después de que su avión fuera derribado se sintió como si fuera de una película diferente por completo.
Uma Thurman - Batman & Robin (1997)
Uma Thurman supo mejor que nadie cómo presentar su actuación en esta despreciada película de superhéroes de 1997. En el papel de la fatal Poison Ivy, Thurman ofrece una actuación en extremo agradable. Para citar a Janet Maslin en su crítica contemporánea para el New York Times: “Interpretada por Uma Thurman, Poison Ivy es perfecta, hace alarde de una gran apariencia, una actitud burlona y disfraces locos y extravagantes. Al igual que Mae West, mezcla la verdadera feminidad con la feminidad parpadeante de una ‘drag queen’".
Michelle Pfeiffer - Grease 2 (1982)
La Grease original no ha soportado los estragos del tiempo con mucha gracia, y a su vilipendiada secuela de 1982 le fue aún peor. Sin embargo, Grease 2 tenía una cualidad redentora que vivía y respiraba: su estrella recién llegada de 23 años, Michelle Pfeiffer, cuyo carisma y talento sobrevivieron al hedor de todo el decepcionante filme.
Alan Rickman - Robin Hood: Prince of Thieves (1991)
Es posible que Kevin Costner no haya logrado prender fuego al Bosque de Sherwood con su papel en la adaptación de Robin Hood, Prince of Thieves, pero no se puede decir lo mismo de su coprotagonista, Alan Rickman. La estrella de Die Hard hizo una actuación sobresaliente como el infame Sheriff de Nottingham. ¿Rickman hizo su papel recurrente? Bueno, sí, pero no había nadie mejor para hacer lo que él hace aquí.
Martin Freeman - The Hobbit: An Unexpected Journey (2012)
Forjadas en el resplandor de la trilogía de The Lord of the Rings, las precuelas del Hobbit de Peter Jackson estaban condenadas a vivir a la sombra de sus predecesoras. Pero no muchas personas estaban preparadas para lo malas que estuvieron. Sin embargo, si se mira más allá del CGI dudoso y la trama exagerada, Martin Freeman fue una elección inspirada como un joven Bilbo Bolsón: nadie interpreta a un hombre común genial y burlón (¿o debería ser un hobbit?) como él.
Max von Sydow - Extremely Loud and Incredibly Close (2011)
Se criticó a este estremecedor drama del 11 de septiembre en su lanzamiento por ser “explotador” y tratar de ordeñar el sentimiento de la tragedia de la vida real. Sin embargo, la actuación de Max Von Sydow se salvó de los cuchillos, ya que el legendario actor sueco hizo un papel conmovedor, y sin palabras, como un inquilino anciano. Sus esfuerzos no pasaron desapercibidos y von Sydow fue nominado al Oscar como Mejor Actor de Reparto.
Phil Hartman - Jingle All the Way (1996)
Salvo algunas excepciones notables (como Los Simpson y NewsRadio), el difunto Phil Hartman prácticamente hizo una carrera eclipsando de forma radical a sus coprotagonistas. Durante sus ocho años en Saturday Night Live, un periodo bajo para la reputación del programa, Hartman fue conocido como el “pegamento”. No logró contener todas las grietas en la miserable comedia navideña Jingle All the Way. Sin embargo, fue una presencia agradable y divertida de forma consistente, al interpretar al vecino mezquino de Arnold Schwarzenegger.
Leonardo DiCaprio - The Great Gatsby (2013)
Baz Luhrmann siempre fue una elección extraña para adaptar el clásico literario de F. Scott Fitzgerald; su estilo de cine es de rimbombancia y destello. Mientras Tobey Maguire fue un Nick Carraway bastante monótono, y Carey Mulligan, por lo usual brillante, decepcionó como Daisy Buchannan, DiCaprio fue elegido de forma perfecta como Gatsby y logró el equilibrio adecuado entre inseguridad, fanfarronería y conmoción.
Anthony Hopkins - Transformers: The Last Knight (2017)
Para ser un actor del más alto calibre, Anthony Hopkins todavía es conocido por actuar por compromiso de vez en cuando. Al leer un guion, se presume que marca ciertas páginas con las letras “NAR” (No se requiere actuar). Habría sido perdonado por hacerlo en esta triste secuela de Transformers, pero en cambio, es innecesariamente convincente. Interpreta a un astrónomo sagaz que ha estudiado la historia de los Transformers.
Oscar Isaac - Sucker Punch (2011)
Incluso para los propios estándares del director Zack Snyder, Sucker Punch fue una especie de paso en falso puntiagudo y desagradable. La película, una fantasía sobre una mujer que intenta escapar de una institución mental a través de una serie de mundos de fantasía, fue atacada por la crítica. Sin embargo, Oscar Isaac, que aún no era una estrella de cine, se comportó bastante bien, al interpretar a un funcionario despreciable en las instalaciones.
Adam Driver - Star Wars: Episode IX – The Rise of Skywalker (2019)
Hay mucho que detestar acerca de la última película de la llamada “Skywalker Saga”, desde el diálogo y y el fan service holgazán, hasta la forma en que abandonó los arcos de la historia que antes se daban a personajes como Finn (John Boyega) y Rose (Kelly Marie Tran). Aunque su villano enmascarado, Kylo Ren, es apresurado debido a una descuidada historia de redención para muchos personajes, Adam Driver no deja de hacer un buen trabajo. La fuerza fue en efecto débil en él, pero Driver emergió de los escombros con su reputación intacta.
Ewan McGregor - Star Wars: Episode III – Revenge of the Sith (2005)
Driver no fue el único actor que luchó valientemente para ofrecer una buena actuación en una película de Star Wars bastante mala. El trabajo de Ewan McGregor como Obi-Wan Kenobi fue objeto de escrutinio durante las dos primeras precuelas difamadas de George Lucas, pero en la tercera ya había encontrado su equilibrio.
Michael K Williams - Assassin's Creed (2016)
Incluso para el estándar de las adaptaciones de videojuegos, Assassin's Creed fue mala con M mayúscula. Actores por lo general rentables como Michael Fassbender y Marion Cotillard fueron aquí histriónicos y ridículos; la trama y la caracterización casi resultan increíbles. Pero en medio de esto está Michael K Williams de The Wire, quien ofrece un papel elegante como un asesino haitiano llamado Moussa.
Florence Pugh - Black Widow (2021)
El Universo Cinematográfico de Marvel atrajo a varios actores de élite a sus costas, desde veteranos como Robert Redford y Michael Keaton hasta estrellas más jóvenes como Michael B Jordan y Zendaya. En términos de jóvenes promesas, hay pocos mejores que Florence Pugh, quien apareció como Yelena en el, por lo demás triste, éxito de taquilla de 2021 Black Widow. Pugh hace que la protagonista de la película, Scarlett Johansson, palidezca en comparación, pero el material no está a la altura.
Matthew Lillard - Scooby Doo (2002)
Se puede decir lo que sea sobre la pueril adaptación cinematográfica de 2002 de la clásica caricatura infantil Scooby-Doo, pero no se puede criticar el reparto. Linda Cardellini, Sarah Michelle Gellar, Freddie Prinze Jr. se adaptan bien a los papeles de Velma, Daphne y Fred respectivamente, pero no son competencia para Matthew Lillard (Scream; Twin Peaks: The Return), cuya enorme actuación como el irresponsable holgazán Shaggy Rogers es una clase magistral de cómo entender un papel.
Raul Juliá - Street Fighter (1994)
El incomparable Raúl Juliá de The Addams Family murió de forma trágica en 1994 a la edad de 54 años, después de sufrir un derrame cerebral. Si bien puede parecer una vergüenza que su última gran película sea un esfuerzo tan de mala calidad como Street Fighter, la actuación de Raúl Juliá en ella es nada menos que una sensación de culto. Su interpretación del villano M Bison es muy divertida, un complemento maravilloso para un grupo de adversarios indignos.