Andrea Legarreta y Erik Rubín: ¿Por qué se separaron? Aquí una cronología de la relación de la pareja
Con solo tres meses de noviazgo, Rubín le propuso matrimonio a Legarreta; desde entonces, se juraron amor eterno y procrearon a dos hijas
A poco de cumplir 23 años de casados, una de las presentadoras más connotadas de la televisión mexicana, Andrea Legarreta; y un consagrado cantante del género pop, Erik Rubín; decidieron dar por terminada su relación de matrimonio.
La noticia fue dada a conocer a través de un comunicado en sus redes sociales: “Hoy hemos decidido compartir algo muy personal. Una decisión que no ha sido fácil y que tomamos hace más de 5 meses. Hoy sentimos que nuestra historia en pareja se ha transformado y, desde la más profunda sinceridad, respeto y honestidad, y por el gran amor que nos tenemos, seguiremos amándonos desde otro sitio”, dijo la pareja.
La separación fue algo inusitado, pues Andrea y Erik eran considerada una de las parejas más estables del mundo del espectáculo. A menudo, compartían fotografías en sus respectivas cuentas de Instagram, departiendo con sus hijas, lo mismo en un destino turístico que en su hogar.
Destinados a estar juntos
Legarreta y Rubín se conocieron durante la década de los noventa, cuando ella estudiaba en el Centro de Capacitación Infantil de la cadena Televisa; y él era parte de la agrupación más famosa del momento, el Grupo Timbiriche.
Según contaron en algunas entrevistas, ambos coincidieron en la telenovela “Alcanzar una estrella”, en 1991; pero nunca llegaron a hacer una escena juntos. Si bien Legarreta no era una actriz consagrada, sí comenzaba a adquirir notoriedad en el consorcio de medios.
El coqueto llegó años después, cuando se reencontraron en la discotecaVintage en 1999; en ese momento, Rubín quedó flechado por la mujer de cabello castaño que se encontraba en el mismo lugar. Sí, era Andrea Legarreta. Erik buscó la manera de acercarse a ella, pero fue gracias al apoyo de Rafael Villafañe –amigo de ambos– que se juntaron.
“¿Cómo ves? Dice Erik que vas a ser la madre de sus hijos”, dijo Villafañe.
Legarreta, con cierto escepticismo, aceptó la presentación sin imaginarse que ese sería el inicio de una vida llena de amor.
Boda en Acapulco
Con solo tres meses de noviazgo, Rubín le propuso matrimonio a Legarreta; desde entonces, se juraron amor eterno y procrearon a dos hijas. Según contó ella en alguna ocasión, sus padres nunca estuvieron tan de acuerdo en la relación que tenía con Rubín, hasta que se fue ganando la confianza y cariño de sus suegros.
Pero fue hasta el 1 de abril del año 2000, que se juraron fidelidad hasta el último de sus días en una ceremonia religiosa realizada en el puerto de Acapulco, Guerrero, a la que acudieron familiares y amigos de la farándula.
A lo largo de 22 años, Andrea y Erik vivieron altibajos, entre ellos, la pérdida de su primer hijo y cientos de rumores de infidelidad, traición e, inclusive, violencia física y económica. Nada de eso fue cierto o al menos no fue confirmado por la pareja.
Hoy día, han decidido terminar con su matrimonio; pero los sostiene el cariño por sus hijas Mía, de 17 años; y Nina, de 16.