Abierto de Australia: Djokovic elimina a Raonic pese a lesión y alcanza su victoria 300 en Grand Slam
Venció al canadiense por 7-6 (4), 4-6, 6-1, 6-4
Novak Djokovic lució un vendaje arriba de la cadera derecha e hizo muecas de dolor varias veces al impactar la pelota durante su partido de tres horas contra Milos Raonic que quedó grabado en los libros de historia como su victoria 300 en un Grand Slam.
Para todo el que estaba curioso de la gravedad de su lesión, el serbio lo puso en contexto tras clasificarse a los cuartos de final del Abierto de Australia por 12da ocasión.
“Si no fuera un Grand Slam, habría decidido retirarme del torneo. Sin duda alguna”, dijo Djokovic al ser entrevistado a pie de cancha tras su victoria el domingo por 7-6 (4), 4-6, 6-1, 6-4. “Cuando hice el calentamiento estaba bien. Durante el partido las sensaciones fueron buenas y malas”.
El ocho veces campeón del Open australiano dedicará las próximas 48 horas para recuperarse físicamente de cara al duelo de cuartos contra Alexander Zverev, el sexto preclasificado.
Fue el mismo plan tras la lesión de un músculo abdominal durante su victoria ante Taylor Fritz en la tercera ronda.
Mucho descanso, mucha fisioterapia y, según dijo, “diversos tratamientos con diversos artefactos. Ya saben, sólo píldoras, analgésicos y tratamientos con los médicos ... me sirvió de mucha ayuda”.
No se entrenó el sábado — subrayó que no le pegó a una sola pelota — y no supo hasta el calentamiento tres horas de enfrentar a Raonic si estaría en condiciones de disputar el partido que cerró la sesión nocturna en la arena Rod Laver.
Al final, todo salió bien al dejar en 12-0 su historial contra el canadiense. Brincó sobre un cartel de publicidad en el primer set y terminó observando cuando a Raonic — el 14to cabeza de serie — se le aplicó vendaje en su tobillo derecho durante el segundo parcial.
Djokovic no pudo contorsionarse como suele hacer, pero pudo desplazarse adecuadamente para acumular 41 winners y apenas sufrir un quiebre en 20 juegos con servicio.
Su foja de por vida en las cuatro grandes citas quedó en 300-45, apenas el segundo hombre que alcanza las 300 victorias. El otro es Roger Federer (362-59).
“Gané un partido contra un gran tenista”, dijo Djokovic. “Solo espero que pueda mejorar en los próximos dos días”.
Zverev, finalista del último Abierto de Estados Unidos, derrotó 6-4, 7-6 (5), 6-3 al serbio Dusan Lajovic (23er cabeza de serie) para alcanzar los cuartos de final en Melbourne Park en años seguidos.
Los cruces de cuartos en la parte alta de la llave se cristalizaron de acuerdo a la preclasificación.
La otra sección resultó ser la imprevista.
Con una victoria en sets corridos ante Dominic Thiem, el tercer cabeza de serie y finalista del Open australiano en 2020, Grigor Dimitrov se citó con Aslan Karatsev.
¿Karatsev? Es un ruso que actualmente es el 114 del ranking y que disputar su primer certamen de Grand Slam. La victoria de Dimitrov ante Thiem no debe causar sorpresa.
Después de todo, el búlgaro de 29 años llegó a ser el número 3 del ranking, fue campeón de la Copa Masters y aventaja 3-2 al austriaco en el historial directo, aunque esta fue la primera vez que se toparon en un grande.
Pese a sus excelentes credenciales en el tenis, Dimitrov nunca ha alcanzado la final de un Grand Slam. Y por lo tanto no menosprecia a alguien como Karatsev.
“Estás aquí por algo”, dijo Dimitrov tras la victoria 6-4, 6-4, 6-0 ante el reinante campeón del US Open.
A primera hora, Karatsev derribó a otro cabeza de serie. Vino de atrás para doblegar 3-6, 1-6, 6-3, 6-3, 6-4 al canadiense Felix Auger-Aliassime (20). En la ronda anterior había dejado afuera al argentino Diego Schwartzman (8).
El ruso de 27 años había fracasado en nueve ocasiones previas para acceder al cuadro principal de un Grand Slam, pero finalmente lo logró en Doha el mes pasado, cuando la fase previa del Abierto de Australia se jugó fuera del país por primera vez debido a las restricciones por la pandemia de COVID-19.
Karatsev es apenas el tercer jugador que supera la ‘qualy’ y que llega tan lejos en Australia en la era profesional, y el primero desde Goran Ivanisevic en 1989. El último hombre en meterse entre los ocho mejores en su primer Grand Slam fue Alex Radulescu en el Wimbledon de 1996.
Y habría que remontarse a Patrick McEnroe — el hermano de John — en 1991 para la última vez que un varón con un ranking tan bajo se abre paso en los cuartos de final en Australia.
“He estado trabajando muy duro y ahora se han dado los resultados”, dijo Karatsev sobre su buena racha. “Nunca sabes cuándo se va a dar. Y ha sido aquí”.