Subastan por más de medio millón de dólares auto que usó Maradona
Un lujoso Porsche 911 que uso “Pelusa” durante su estancia en España como jugador del Sevilla fue vendido por 578.000 dólares
Diego Armando Maradona falleció en noviembre del año pasado, sin embargo, “Pelusa” sigue protagonizando historias en la actualidad. Un lujoso Porsche 911 que utilizó el argentino durante su estancia en España como jugador del Sevilla fue vendido por más de medio millón de dólares.
Para la temporada 92/93, Maradona decidió alejarse de Italia y aceptó la oferta del Sevilla, equipo que en aquel entonces era dirigido por su compatriota, Diego Bilardo. El astro argentino, amante de los carros, utilizó un Porsche 911 Carrera convertible para desplazarse desde su villa, alquilada al célebre torero español Juan Antonio Ruiz, "Espartaco", hasta el estadio donde se entrenaba con el equipo andaluz, explicó la casa Bonhams en un comunicado.
“Era un espectáculo habitual ver a Maradona en el Porsche en su trayecto hacia y desde los entrenamientos de fútbol”, señaló la casa de subastas. “Maradona demostró que su pie derecho era tan dominante en el coche como el izquierdo con la pelota, ya que la policía armada lo detuvo por saltar una luz roja y acelerar a 180 km/h en el centro de la ciudad".
El sitio de subastas indicó que el lujoso carro es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 260 km/h (acelera de 0 a 100 km/h en 5.5 segundos), cuenta con motor 3.6 litros, caja de cambios de cinco velocidades y 250 caballos de potencia.
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A lo largo de su trayectoria, tanto como futbolista como entrenador, Maradona coleccionó varios autos deportivos y de lujo. Su primer Porsche lo adquirió cuando tenía apenas 19 años. En 1980, cuando brillaba con Argentinos Juniors, “Pelusa” compró un modelo 924 negro que vendió tras su fichaje con el Barcelona de España.
¿Quiénes han sido los dueños del lujoso Porsche 911 de Maradona?
La casa de subastas informó que existe un documento que muestra que el Porsche 911 fue adquirido por Angelica Bartel, de Mallorca, en 1993 con apenas 7.500 kilómetros. El siguiente dueño de la reliquia fue el francés Bruno Hintze, quien lo compró en el 2000, un año antes de que pasara a manos de su compatriota Jacques Rouy. El último dueño registrado fue Guy Della Casa, de Montbard, quien lo tuvo desde 2003 hasta 2016.