Senador presiona para que FBI informe denuncias de acoso
Un senador presiona al FBI para obtener más información después de que un informante alegó que una revisión interna encontró que 665 personas se fueron de la agencia para no responder a denuncias de acoso en las últimas dos décadas
Un senador está presionando al FBI para obtener más información después de que un informante alegó que una revisión interna encontró que 665 personas se fueron de la agencia para no responder a denuncias de acoso en las últimas dos décadas.
El denunciante le dijo a la oficina del senador de Iowa, Chuck Grassley, el principal republicano en la Comisión Judicial del Senado, que el Departamento de Justicia comenzó a revisar la base de datos disciplinaria del FBI en 2020 luego de una investigación de The Associated Press sobre denuncias de acoso sexual que involucraban al menos a seis altos funcionarios del Buró.
Un seguimiento al caso encontró que 665 empleados del FBI, incluidos 45 funcionarios de alto nivel, renunciaron o se jubilaron entre 2004 y 2020 luego de una investigación por mala conducta, pero antes de que se pudiera emitir una carta disciplinaria final, según una carta que envió esta semana Grassley al director del FBI, Christopher. Wray y al secretario de Justicia, Merrick Garland.
No estaba claro cuántos de esos casos involucran conducta sexual indeseada. La oficina de Grassley, que se niega a dar a conocer la identidad del denunciante o los documentos subyacentes para proteger a dicha persona, dijo que ese era el tipo de información que todavía estaba buscando, pero estimó que el número podría ser de “cientos”.
Cuestionado al respecto, el FBI dijo que tenía la intención de responder primero al comité de supervisión. Se negó a comentar específicamente sobre la acusación del denunciante o proporcionar su propio recuento de casos disciplinarios y cuántos de ellos involucraron conducta sexual indeseada.
La investigación de AP en diciembre de 2020 identificó al menos seis denuncias de acoso sexual que involucraron a altos funcionarios del FBI durante los cinco años previos, desde tocamientos e insinuaciones no deseadas hasta coerción.
La AP halló que varios altos funcionarios evitaron medidas disciplinarias, transfiriéndose silenciosamente o jubilándose con todos los beneficios, incluso después de que se corroboraron las denuncias en su contra. Entre ellos hay un subdirector del FBI ahora jubilado.