Nueva fundación busca ayuda para grupos LGBT en Polonia
Una escritora laureada con el Nobel, una cineasta, una estrella de Netflix y una modelo están entre los miembros de una iniciativa lanzada para recaudar dinero para grupos defensores de los derechos LGBT en Polonia, donde los gays, bisexuales y transgénero enfrentan discriminación del gobierno conservador y la Iglesia católica
Una escritora laureada con el Nobel, una cineasta, una estrella de Netflix y una modelo están entre los miembros de una iniciativa lanzada el martes para recaudar dinero para grupos defensores de los derechos LGBT en Polonia donde los gays, bisexuales y transgénero enfrentan discriminación del gobierno conservador y la Iglesia católica.
La Fundación Equaversity planea solicitar donaciones internacionales para financiar a las organizaciones que trabajan dentro de Polonia. Los activistas en la fundación dicen que la ayuda es necesaria para contrarrestar la retórica homofóbica en los más altos niveles del gobierno polaco y de los líderes católicos.
“No podemos contar con ayuda dentro del país”, dijo la modelo Anja Rubik, miembro de la junta de la fundación.
Junto con Rubik, la junta incluye a la escritora Olga Tokarczuk, ganadora del Nobel; la cineasta Agnieszka Holland y a Antoni Porowski, un chef polaco-canadiense que es una de las estrellas del programa de Netflix “Queer Eye”.
En una conferencia online el martes, varios miembros describieron la nueva fundación como una forma de responder a la creciente discriminación hacia las personas LGBT que ellos consideran parte de un amplio ataque a los valores democráticos en Polonia, una nación ubicada entre Europa Occidental y autocracias en el este.
El presidente polaco Andrzej Duda dijo el año pasado en su campaña de reelección que el término “LGBT” “no se refiere a personas”, sino a “una ideología” más peligrosa que el comunismo. El ministro de Educación ha dicho que las personas LGBT no son iguales a las personas “normales”.
Mientras, los líderes de la Iglesia católica han usado el término “la peste arcoíris” para describir dicho movimiento.
Esa atmósfera ha llevado a algunas personas LGBT a dejar el país. La cineasta Holland dijo que 70% de los jóvenes LGBT en Polonia tienen pensamientos suicidas.
“Simplemente tenemos que luchar por sus vidas”, dijo.
Sebastian Hejnowski, un profesional de relaciones públicas que es parte de la directiva de la fundación, dijo que ve en Polonia un enfrentamiento entre las fuerzas conservadoras y una nueva generación de personas jóvenes que está en favor de la aceptación de las minorías sexuales.