Llega más ayuda a inquilinos en peligro de desalojo en EEUU

Casi un mes después de que expiró una moratoria federal de desalojos en Estados Unidos el Departamento del Tesoro anunció el viernes que los estados y municipalidades distribuyeron casi 1,4 millones de pagos en agosto y que el ritmo se aceleró respecto al mes previo.

Más de 16,5% de las decenas de miles de millones de dólares en asistencia federal para pagar el alquiler llegó a los inquilinos el mes pasado, comparado con 11% en julio. Los datos más recientes de Departamento, que supervisa el programa, indican además que los estados y las ciudades que se demoraron en arrancar sus programas están enviando ahora decenas de millones de dólares a sus destinatarios.

Los legisladores aprobaron 46.500 millones de dólares en gastos en asistencia al alquiler, pero hasta ahora los estados y municipalidades están mayormente repartiendo la primera entrega de 25.000 millones, que deberá ser gastada para el 30 de septiembre de 2022. La segunda entrega de 21.500 millones puede ser repartida hasta el 30 de septiembre de 2025.

Funcionarios del Tesoro reconocen que no están satisfechos con la distribución total, pero insistieron en que lo entregado hasta ahora es un número significativo y que el dinero estaba ayudando a mantener a las familias en sus hogares.

La nueva actualización se produce en momentos en que aumentan las presiones para distribuir más rápidamente el dinero luego de que la Corte Suprema falló en agosto que podían reanudarse los desalojos. La mayoría conservadora de la Corte bloqueó los intentos del gobierno de Joe Biden de implementar una congelación temporal de los desalojos debido a la pandemia.

Aunque los desalojos no se han disparado en la mayoría de las comunidades, existen preocupaciones de que millones de inquilinos elegibles para la ayuda pudieran ser desalojados antes de que les llegue el dinero. Para el 13 de septiembre, casi 3,3 millones de personas dijeron que era probable o muy probable que fueran desalojadas en los próximos dos meses, de acuerdo con un sondeo de la Oficina del Censo. En el sondeo hasta el 30 de agosto, más de 3,6 millones dijeron que enfrentaban desalojo.