El papa Francisco visitará el Líbano en junio
El papa Francisco visitará Líbano en junio, dice la oficina del presidente, en una muestra aparente de apoyo al país que sufre un colapso económico sin precedentes
El papa Francisco visitará Líbano en junio, dijo la oficina del presidente el martes, en una muestra aparente de apoyo al país que sufre un colapso económico sin precedentes.
El papa ha orado por el Líbano y ha dicho reiteradamente que planea visitar el país desde que comenzó la crisis económica en octubre de 2019.
Será la primera visita al Líbano después de la del papa Benedicto XVI en 2012.
La oficina del presidente Michel Aoun dijo que recibió al embajador del Vaticano, quien le informó que el papa visitará en junio y que la fecha exacta y agenda la dará a conocer más adelante.
“Los libaneses han esperado esta visita durante mucho tiempo para expresar su agradecimiento al papa por su posición hacia el Líbano y su pueblo”, dijo Aoun.
La visita del papa se produce después de una enorme explosión en el puerto de Beirut el 4 de agosto de 2020 que mató a 216 personas, hirió a más de 6.000 y dañó partes de la capital. La detonación de cientos de toneladas de nitrato de amonio mal almacenadas produjo una de las explosiones no nucleares más grandes de la historia.
Más del 70% de los 6 millones de habitantes, lo que incluye 1 millón de refugiados sirios, viven en la pobreza debido a la crisis provocada por décadas de corrupción y desgobierno de la clase dominante.
La libra libanesa ha perdido el 90% de su valor y decenas de miles de personas han perdido su trabajo durante una crisis que el Banco Mundial considera una de las más graves del mundo desde la década de 1850.
Francisco dijo el año pasado que Líbano debe seguir siendo una “tierra de tolerancia y pluralismo” al recibir a los patriarcas cristianos libaneses en el Vaticano para orar por el fin de la crisis económica y política que ha sumido al país en el caos y amenaza a su comunidad cristiana.
Líbano tiene el mayor porcentaje de cristianos del Medio Oriente y es el único país árabe con un jefe de estado cristiano. Los cristianos constituyen un tercio de la población. El Vaticano teme que el derrumbe del país sea particularmente peligroso para la comunidad cristiana, un baluarte de la iglesia en el Medio Oriente.